Mientras los Chicago White Sox exploran la posibilidad de construir un nuevo estadio en el South Loop, el gobernador de Illinois, J.B. Pritzker, expresa escepticismo sobre el papel del estado en ese proceso.
En declaraciones a los periodistas el lunes, Pritzker dijo que "los dólares de los contribuyentes son valiosos" y que ha optado por permanecer cauteloso mientras el equipo comienza a impulsar la financiación pública.
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"Comienzo realmente reacio”, dijo Pritzker, "Y a menos que se demuestre que la inversión produce un retorno a largo plazo para los contribuyentes que podamos justificar de alguna manera, no lo he visto todavía".
Pritzker dice que está "apoyando" a los equipos para que tengan éxito en los negocios en el estado, pero dijo que a pesar del aspecto de las representaciones proporcionadas del parque propuesto, el estado no puede priorizar el proyecto en este momento.
“Creo que las fotografías que todos hemos visto… todas lucen fabulosas. Pero, una vez más, eso no es suficiente para convertirlo en una prioridad, en mi opinión, para Springfield", dijo Pritzker.
Los White Sox tienen un contrato de arrendamiento en Guaranteed Rate Field hasta 2028 y han comenzado el proceso de diseño de un estadio de béisbol y servicios circundantes en un sitio en South Loop conocido como "The 78".
En las últimas semanas, el presidente Jerry Reinsdorf viajó a Springfield para reunirse con legisladores y, según se informa, el equipo presionó para obtener $1.1 mil millones en financiamiento estatal para la construcción de un nuevo estadio, según una entrevista que Reinsdorf realizó con Crain's Chicago Business.
En total, el coste total del estadio y sus alrededores podría superar los 4 mil millones de dólares, según la publicación.
El equipo propuso pagar el proyecto extendiendo un impuesto al servicio hotelero que se utilizó para pagar bonos en el Guaranteed Rate Field.
El equipo también podría buscar ayuda de la ciudad de Chicago para financiar el proyecto, pero los impuestos que podrían asignarse a ese proyecto también se están utilizando para cancelar la deuda de las renovaciones del Soldier Field, que se completaron en 2002.
El sitio propuesto está ubicado cerca de la intersección de Roosevelt Road y Clark Street. El río Chicago y varias líneas de tren se encuentran cerca del sitio, los cuales podrían influir en el diseño y la estructuración de un parque.
Los White Sox han jugado en Guaranteed Rate Field desde 1991, y anteriormente habían jugado en 35th Street en Comiskey Park desde 1910.
El exgobernador de Illinois, Jim Thompson, ayudó a impulsar un acuerdo para financiar públicamente el Guaranteed Rate Field mediante la creación de la Autoridad de Instalaciones Deportivas de Illinois a finales de los años 1980.
Los contribuyentes estatales todavía deben aproximadamente $50 millones en bonos utilizados para construir el estadio.
El estado sigue siendo responsable de las reparaciones capitales del estadio, y los White Sox ahora pagan el alquiler del estadio hasta el final de su contrato de arrendamiento.
En agosto de 2023, Crain's Chicago Business informó que los White Sox considerarían mudarse del estadio al finalizar su contrato de arrendamiento. Reinsdorf se reunió con el alcalde de Nashville, Freddie O'Connell, durante las reuniones invernales del béisbol, lo que alimentó aún más las especulaciones sobre el interés en ubicar un equipo de Grandes Ligas en la ciudad.
Se han discutido otros sitios en Chicago, incluidas ubicaciones cercanas al United Center, del que Reinsdorf es copropietario junto con el presidente de los Blackhawks, Danny Wirtz.
