Un jurado del centro de Illinois dictaminó que un cirujano pediátrico actuó negligentemente en su tratamiento de una bebé hace más de una década y otorgó a la adolescente más de $2 millones, según el bufete de abogados que representa a la adolescente y su familia.
Un jurado del Condado de Peoria emitió un veredicto el viernes y encontró que el Dr. Mark Holterman, entonces cirujano pediátrico en el Hospital Infantil OSF en Peoria, fue negligente en relación con su tratamiento de la niña en 2011, dijeron Romanucci and Blandin en un comunicado.
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En julio de 2011, cuando la niña tenía 9 meses, Holterman la examinó para ver su esófago cuando llegó al hospital tras un episodio de atragantamiento.
El cirujano encontró un trozo de zanahoria dentro y un área estrecha que dilató, según el comunicado de los abogados. El cirujano causó una rotura de dos centímetros en el esófago de la infante al hacerlo, alegó el bufete de abogados.
Utilizó una endoprótesis, o stent, para intentar cubrir la rotura, pero lo dejó caer en su estómago, donde permaneció durante 11 meses, según el bufete de abogados.
Durante ese tiempo, la infante desarrolló problemas para alimentarse y dependía de un tubo de alimentación insertado a través de su abdomen hasta su estómago. Los abogados explicaron que el cirujano utilizó una presión significativa con lo que dijeron era un dispositivo obsoleto y rompió el esófago.
Según los abogados, la endoprótesis nunca había sido aprobada para su uso en el esófago de un bebé, algo de lo que los padres de la niña no estaban al tanto.
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"Holterman afirmó que estaba siendo innovador cuando intentó colocar la endoprótesis [de vía aérea para adultos] en su esófago", declararon los abogados. "Dijo que estaba tratando de hacer un platillo de pollo con plumas de pollo..."
La madre de la niña testificó que sentía que su hija era un "conejillo de indias" cuando usó la endoprótesis sin dar detalles completos sobre si alguien más lo estaba usando de la misma manera, según el comunicado de prensa del bufete de abogados.
