CHICAGO – Las icónicas banderas puertorriqueñas que dan la bienvenida al Paseo Boricua en el vecindario de Humboldt Park, se convirtieron oficialmente en un marcador histórico de Chicago.
Esta designación fue resultado de una votación que se llevó a cabo en el Concilio de Chicago este miércoles luego de que la Comisión de Monumentos de la ciudad aprobara en abril su nominación por voto unánime, pasara por la revisión tanto del Departamento de Planificación de Chicago como del Comité del concejo municipal.
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Estas imponentes banderas que marcan el tramo de media milla de Division Street, entre las avenidas California y Western, son consideradas como la zona centro de la comunidad puertorriqueña de este vecindario.
Los comisionados habían indicado en abril que el reconocimiento está atrasado, pues las banderas de casi 60 pies de altura se encuentran entre el arte cívico más célebre de Chicago, considerados no tan solo como marcadores del territorio puertorriqueño de Humboldt Park, sino como un poderoso símbolo del orgullo puertorriqueño en todo Chicago y el Medio Oeste.
Es preciso mencionar que las banderas fueron erigidas el 6 de enero de 1995, el Día de los Reyes Magos, que es una de las fiestas más celebradas en Puerto Rico.
Cabe señalar que las banderas fueron diseñadas por el estudio de arquitectura local DeStefano & Partners para representar las puertas de entrada a la comunidad puertorriqueña de Humboldt Park. La firma usó acero para honrar a aquellos boricuas que vinieron a Chicago a trabajar en las industrias del acero y la soldadura.
Cada bandera pesa 50 toneladas y, según los informes, puede aguantar vientos de hasta 70 mph.
Hasta el momento, las banderas han sido el último proyecto de entrada en Chicago en obtener el estatus de monumento histórico.
