La arquidiócesis de Chicago notificó a ocho parroquias que retiró de los servicios al padre William Killeen mientras se investiga una denuncia de abuso sexual infantil recibida esta semana, de acuerdo con un comunicado.
El anuncio lo hizo el cardenal Blase Cupich, arzobispo de Chicago. El sacerdote no podrá oficiar en las parroquias San Alejandro en Palos Heights, Santa Patricia en Hickory Hills, San Miguel en Orland Park, San Cristóbal (ahora San Agustín) en Midlothian, Niño Jesús de Praga (ahora Santa Verónica) en Flossmoor, San Francisco Javier en La Grange, San Cleto en La Grange y San Juan de la Cruz en Western Springs.
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Según la denuncia, el abuso ocurrió hace aproximadamente 40 años en la parroquia St. Patricia en Hickory Hills, algo que el padre Killeen niega.
En el comunicado de la Arquidiócesis se menciona que tras la acusación se notificó a las autoridades civiles, a la persona que hizo la denuncia y se le ofrecieron los servicios del Ministerio de Asistencia a las Víctimas de la arquidiócesis.
El sacerdote Killen había estado retirado desde 2019, pero oficiaba misas de manera ocasional en las parroquias St. Francis Xavier y St. Cletus, ambas en La Grange y St. John of the Cross en Western Springs.
La Arquidiócesis de Chicago, la tercera más grande de los Estados Unidos, atiende a más de 2,2 millones de católicos en 216 parroquias en los condados de Cook y Lake.
