Cuando se celebra un proceso electoral, más allá de saber quién ha ganado, lo que a los votantes les interesa saber es en qué cambiará su vida y cómo afectarán los resultados a su economía y rutina.
Estas elecciones cobraron una mayor importancia en algunas pequeñas comunidades del país, ya que a pesar de ser localidaes con bajo nivel de población, los resultaros causaron un impacto en la comunidad.
A veces se trata de diferencias insignificantes que no producen ningún cambio en la vida de los ciudadanos, pero otras veces, los cambios pueden ser sustanciales.
Por ejemplo, en un suburbio de Seattle llamado Sea Tac donde consiguieron aumentar el salario base en $15 la hora para la mayoría de trabajadores del principal aeropuerto de Seattle.
El estado de Washington, de todas formas, ya es el estado con el mayor salario mínimo, $9.19 la hora, pero un aumento de casi $5 la hora para estos trabajadores es algo sustancial, teniendo en cuenta que el salario mínimo federal es de $7.25 la hora.
También en ese mismo estado, pero en otra localidad, los comicios sirvieron para entablar una batalla entre los que apoyaban el sector minero y los ambientalistas, con una victoria inincial de estos últimos.
Las compañías mineras y de energía gastaron $200,000 durante la campaña, pero los grupos ecologistas gastaron cerca de $500,000.
Historias Destacadas
En Colorado no prosperó la propuesta 66 que proponía el aumento del ratio de impuesto para los que tienen un salario de más de $75,000, para conseguir una inversión de $950 millones en educación.
El caso más curioso el de Nueva Jersey donde a pesar de la abultada victoria de Chris Cristie, los votantes le dieron un aviso. El año pasado, Cristie vetó un aumento del salario mínimo, pero en los comicios del martes, los habitantes del estado apoyaron la propuesta de incrementar el salario base a un $8.25 la hora.
