Los fuertes vientos que soplaron el miércoles causaron daños en Chicago y suburbios durante horas de la noche y madrugada del jueves.
Una advertencia de viento fuerte estuvo en efecto y por momentos se sintieron ráfagas de más de 30 millas horas causando que un edificio colapsara en el vecindario de Avondale al noroeste de Chicago.
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Un muro y otras partes de la estructura abandonada en la cuadra 2900 de North Campbell Avenue se derrumbaron durante la noche, dejando ladrillos esparcidos en el suelo y causando daños en un edificio vecino que alberga una empresa llamada New City Moving.
También hubo cientos de reportes de árboles caídos debido a los fuertes vientos, como en la cuadra 7000 de North Damen Ave., en Rogers Park, donde un árbol enorme y un poste de luz cayeron sobre tres autos, aplastándolos.
Algo similar ocurrió también en la 70th Street y South Oglesby, donde el jueves en la mañana donde varios árboles grandes cayeron sobre vehículos causando daños extensos.
En suburbios del norte de Grayslake en el condado Lake, un poste del tendido eléctrico fue arrasado por el viento electricidad causando que los cables se rompieran. En los suburbios del oeste de Bartlett, un árbol de 30 pies de alto de desprendió y cayó al suelo.
El jueves los pronósticos muestran vientos de 15 a 25 mph con ráfagas de hasta 35 mph, y alguna que otra llovizna en condados del extremo sur y el noroeste de Indiana.
