Yoani Sánchez, incrédula recibe pasaporte

LA HABANA - Las autoridades cubanas le expidieron un pasaporte a la disidente Yoani Sánchez, quien no había sido autorizada a viajar en una veintena de veces anteriores y ahora lo hará en virtud de la nueva reforma migratoria.

"Increíble!! Me llamaron a casa para decirme que ya estaba listo mi pasaporte! Acaban de entregármelo! :-) ", escribió Sánchez en su cuenta de Twiiter el miércoles por la tarde.

"Aquí está, ahora falta poder abordar ese avión", agregó la bloguera opositora, quien hasta este momento se mostraba poco optimista de poder salir del país.

Una nueva ley, vigente desde el 14 de enero que flexibiliza los viajes para los cubanos estableció a partir de ese momento que los ciudadanos no tendrían que tramitar un muy criticado permiso de salida llamado "tarjeta blanca" --exigido durante cinco décadas-- y podrían hacerlo solo con sus pasaportes.

También estableció reglas claras de quienes no podrían acceder al pasaporte como las personas con procesos penales en marcha, cumpliendo sanciones o por "seguridad nacional", un apartado que dio lugar a especulaciones sobre si se les aplicaría a los disidentes.

Las autoridades cubanas no reconocen estatus de opositores a los disidentes, a los cuales acusa de recibir dinero y orientaciones de grupos de interés de Estados Unidos y Europa dispuestos a todo para desprestigiar y destruir a la revolución.

Sánchez es autora de un blog muy activo llamado Generación Y desde el cual mantiene una fuerte campaña de críticas al gobierno culpándolo desde los problemas de vivienda y salubridad de la isla pasando por reportes de incendios y hasta incluyendo informaciones no siempre confirmadas.

La mujer, quien ganó varios premios internacionales por su portal, indicó en reiteradas ocasiones que no se le había entregado en más de 20 ocasiones la tarjeta blanca, por lo cual no había podido asistir a eventos o encuentros a los cuales fue invitada.

Paralelamente otro disidente, Angel Moya, quien fue excarcelado luego de una negociación entre el gobierno, la iglesia católica y España en febrero de 2011 indicó también este miércoles que una empleada gubernamental le informó que no podría tramitar su pasaporte pues su causa judicial seguía vigente.

"La funcionaria me comunicó, previa búsqueda en la base de datos, que yo estaba regulado (o sea tenía un obstáculo legal) y por interés público no se me podía tramitar el pasaporte puesto que todavía no había extinguido la sanción", indicó Moya en entrevista telefónica con AP.

Moya, quien había sido encarcelado en 2003 junto a otros 74 opositores no violentos y posteriormente liberado, pero no amnistiado, indicó que no fue tomado por "sorpresa" por la denegación.

El disidente que había sido condenado a 20 años de cárcel consideró que "al estar politizada" la ley migratoria concede al gobierno la potestad de decidir quien entra y sale del país.

La misma situación podría aplicarse al grupo de varias docenas de ex presos políticos que fueron liberados y no emigraron entre 2010 y 2011, cuando se realizaron las negociaciones.

"Su liberación es muy precaria", dijo a la AP el activista de derechos humanos, Elizardo Sánchez de la no gubernamental Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.

Bertha Soler, quien es una activista del grupo opositor Damas de Blanco y esposa de Moya informó que había iniciado el trámite del pasaporte y espera que se lo entregaran a comienzos de febrero.

Contáctanos