Alimentar a las palomas podría salirle caro a los residentes de Chicago, eso sí un concejal consigue que se apruebe su propuesta.
El concejal James Cappleman (46) está cansado de los centenares de aves que visitan a diario su vecindario de Uptown, y de sus excrementos. Cappleman propone hacer que el acto de alimentar a las palomas sea ilegal en la ciudad ya que dice que en su barrio hay quienes dan hasta cuatro libras de pan, al día, a las aves. El miércoles, durante una reunión del Concilio, Cappleman introdujo una propuesta de ley municipal que prohibiría la alimentación de las aves en los espacios públicos. Además propone que los infractores paguen una multa de hasta $1,000 dólares y seis meses de cárcel. Cappleman dijo que la situación está perjudicando a los negocios locales y a la comunidad en general, agregando que hasta 800 palomas se reúnen debajo de los puentes del tren elevado, al punto que algunas personas tienen miedo de caminar por la calle.
