Mientras miles reparan los daños que ocasionaron las inundaciones durante las tormentas de la noche del jueves, otra ronda de tormentas se cierne sobre el área metropolitana de Chicago.
Además de una alta temperatura, podrían ocurrir lluvias torrenciales en algunas zonas y más inundaciones repentinas para el viernes en la noche y el sábado.
Este viernes, Chicago experimenta un respiro de la lluvia torrencial. La temperatura estará cerca de los 85 grados.
Modelos meteorológicos muestran lluvias y tormentas eléctricas dispersas para el viernes por la tarde y noche.
Algunas de estas tormentas podrían producir lluvia torrencial, frecuentes relámpagos, ráfagas de viento de hasta de 50 millas por hora y granizo, según el Servicio Meteorológico Nacional.
La principal amenaza continúan siendo las inundaciones repentinas.
Varias pulgadas de lluvia cayeron en la zona durante la noche, sobre todo en los sectores sur y suroeste, lo que obligó a cerrar porciones de las autopistas Eisenhower y Kennedy así como retrasos en la Autoridad de Transporte de Chicago.
Los totales de lluvia incluyeron 3.12 pulgadas en Wheatfield, Indiana; 2.6 pulgadas en Downers Grove; 2.3 pulgadas en Woodridge; y 2 pulgadas en Burnham.
Tres pulgadas de lluvia cayeron en el Aeropuerto Midway así como 1.47 pulgadas en O'Hare durante 1:00 y 4:00 a.m.
Unas 5 pulgadas cayeron los suburbios de Oak Lawn y Burbank.
El domingo parece ser que será el día más caluroso con temperaturas en los 90 grados.
