Más de 150 toneladas de marihuana, descubiertas en diversos operativos en el norteño estado de Sonora, fueron destruidas por agentes de la Policía Federal.
Los plantíos fueron ubicados en cinco terrenos acondicionados para el cultivo del enervante, localizados en las inmediaciones del municipio de Álamos.
Según la Comisión Nacional de Seguridad, el primero de los cultivos fue localizado en el ejido “El Palmarito“, de 5,500 metros cuadrados de superficie. Cada metro cuadrado contaba con 10 plantas, lo que dio un total de 22 toneladas.
Después hallaron otro sembradío en el ejido Agua Caliente de Antelo, de 9,000 metros cuadrados y 10 plantas por metro cuadrado, lo que dio un aproximado de 36,000 kilos de marihuana.
El tercer plantío fue ubicado en la misma zona, en un terreno de 7,000 metros cuadrados, y tenía una densidad de 12 plantas por metro cuadrado, con un peso cercano a los 50,400 kilos.
En las inmediaciones del mismo ejido, lubicaron otro cultivo con un espacio de 750 metros cuadrados con plantas de un peso aproximado de 3,000 kilos.
El último sembradío tenía una superficie de 3,850 metros cuadrados y una densidad de 15 plantas por metro cuadrado, lo que dio un peso cercano a los 40,425 kilos.
