Nota del editor: Los detalles a continuación podrían ser perturbadores para algunas personas.
El propietario de un gimnasio en Washington DC fue arrestado el martes y acusado de distribuir pornografía infantil tras una investigación en la que se refirió a sí mismo como “pedófilo” ante un agente encubierto del FBI, según una orden de arresto.
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El hombre fue identificado como Michael Everts, de 48 años, propietario de FIT Personal Training en Dupont Circle. En 2014, The Washington Blade describió su gimnasio como "el gimnasio de entrenamiento personal más antiguo de Dupont", fundado en 2004.
Los documentos presentados en relación con el arresto de Everts indican que los agentes del FBI que lo detuvieron por cargos de pornografía infantil habían estado preparando un caso durante meses.
Según la orden de arresto, la agencia federal fue alertada sobre él en julio pasado cuando un empleado de la aplicación de conexión basada en la ubicación Sniffies les dijo que Everts buscaba activamente a hombres menores de edad.
Alguien descrito como un empleado encubierto en línea (OCE) del FBI contactó a Everts a través de una aplicación diferente, Telegram, identificándose como un padre.
Everts supuestamente dijo: "¿Cuántos años tiene su hijo?"
El agente encubierto respondió: “A punto de cumplir 11 años”.
Everts presuntamente respondió: "La edad más sexy de todos los tiempos".
Luego, continuaron conversando a través de la aplicación. “Mis edades favoritas son entre los 9 y los 12 años. Hay muchos chicos atractivos en el área noroeste de DC”, dijo Everts supuestamente.
Según una orden de arresto, el sospechoso envió fotografías de niños en etapa de pubertad y finalmente envió videos que parecen mostrar a hombres abusando sexualmente de niños.
Las autoridades dijeron que Everts envió un mensaje: “Ahora está 1000% verificado. Soy un pedófilo. Envié pornografía infantil… para protegernos a ambos”.
Los dos hicieron planes para reunirse en la tienda Apple frente al Centro de Convenciones de DC, donde Everts fue detenido.
Después de su arresto, se ordenó que Everts fuera encarcelado hasta su próxima comparecencia ante el tribunal y se le proporcionó un defensor público.
