SAN FRANCISCO - Personas que trataron de quejarse ante las autoridades de la ciudad por lo que consideraron un ruidoso ambiente alrededor de la maratón que se corrió el domingo en la ciudad se encontraron con una extraña sorpresa.
Cuando llamaron a la línea 311 para dejar su queja fueron remitidos, por error, a una línea caliente o línea de sexo.
De acuerdo con funcionarios de la ciudad dieron un número equivocado que empezaba con 800 en vez del 866 que tenía la línea telefónica de la maratón.
Las autoridades de la ciudad investigan cómo se dio esa confusión de números.
La directora del 311, Nancy Alfaro, dijo que esto ocurrió por un lapso de media hora, antes de que alguien se diera cuenta de qué estaba pasando, por lo que no es claro el número de personas que fueron remitidas equivocadamente a la línea caliente.
