Peleas familiares complican búsqueda de niña desaparecida

La pequeña hispana de nueve años desapareció de su casa el domingo a la noche.

Mientras las autoridades continúan la búsqueda de la niña hispana de nueve años que desapareció el domingo desde su casa, las rencillas y acusaciones entre familiares tuvieron su clímax cuando la pareja del padre biológico de la menor llegó a la vivienda e increpó al padrastro de la niña.

Todo se desató a partir de la desaparición de la menor el domingo 29 de mayo de su vivienda en Fort Myers, tal como lo reportó a las autoridades la madre, quien lleva un embarazo de ocho meses.

Una Alerta Amber fue emitida en la Florida este jueves para una niña de Fort Myers que desapareció el domingo.
La Alerta Amber dice que puede estar en la compañía de Jorge Guerrero, de 28 años, que ha estado viviendo en los condados de Orange y Okeechobee. Un Chevrolet Malibu color bronce con placas de la Florida 78NHD donde se cree que se trasladaba habría sido localizado.
Miembros de la familia dijeron que Guerrero había alquilado una habitación en la casa de la familia, pero se había mudado hace un mes.
Diana fue vista por última vez el domingo en el 3500 Unique Circle en Fort Myers, según el Departamento de Policía de Florida.
La menor, de origen hispano, se esfumó de su casa sin razón aparente según explicó su mamá.
La mujer, que tiene ocho meses de embarazo, dijo que al levantarse en la mañana notó que Diana no estaba.
Y que entonces su padrastro alertó a la policía.
El hombre dice que quedó detenido durante una noche como principal sospechoso.
Pero que fue liberado después.
El mayor temor de la madre era que el padre biológico, deportado a México, tuviera que ver con su desaparición.
Pero aún hay detalles por esclarecer, pues la madrastra de la niña confrontó con violencia a la pareja.
Mientras, un número importante de agentes federales y locales están asignados a la búsqueda de Diana.
Los oficiales indicaron que la vivienda, ubicada entre casas móviles, no muestra que sus entradas hayan sido forzadas.
A la par de la policía, los vecinos también hacen un gran esfuerzo para ubicar a Diana.
Algunos de ellos refieren que la niña era muy tranquila y que siempre estaba junto a su mamá.
Diana no posee teléfono celular, lo que dificulta poder tener acceso a su geolocalización.

La pareja de la mamá, mientras tanto, fue el blanco de serias acusaciones por parte de una mujer quien se identificó como la pareja del padre biológico de la niña, quien supuestamente fue deportado a México.

La mujer llegó a la vivienda, ubicada en un parque de casas rodantes, e increpó con dureza al padrastro. Ambos mantuvieron una acalorada discusión hasta que fueron separados.

Mientras tanto, decenas de agentes y oficiales de policía se han sumado a la búsqueda de la niña quien no ha sido vista desde el domingo a la noche.

El caso mantiene en vilo tanto a la familia y amistades de la niña como a las autoridades quienes han redoblado esfuerzos para dar con la niña.

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