Los 5 beneficios de cenar en familia

El ritmo de vida actual nos deja poco tiempo tanto para la vida familiar como para alimentarnos correctamente. Con un poco de esfuerzo, podemos hacer de la hora de la cena un momento saludable, en el que mejoremos la comunicación con nuestros hijos y compartamos comida variada y nutritiva. Los especialistas explican en detalle cuáles son los beneficios de cenar en familia: Mejor nutrición. Los niños que cenan en familia se alimentan mejor. Ellos comen más frutas y vegetales que chatarra, señala un estudio de la Escuela Médica de Harvard. También se ha demostrado que es el mejor modo de enseñarles a probar nuevos alimentos. En casa es más fácil controlar el tamaño de las porciones y la cantidad de calorías que ingieren. Mejor comunicación. Las cenas en familia ayudan a la comunicación con los hijos, previenen y permiten reconocer y corregir conductas como el sexo temprano y el uso de alcohol, tabaco y drogas. Además, los niños que cenan con frecuencia con sus padres tienen mejores notas que los que lo hacen menos de tres veces por semana. Más económico. Para los padres, cenar con los hijos es más sano emocionalmente (sobre todo, para las madres) y en cuanto al dinero: cada comida fuera de casa cuesta casi el doble que la alternativa casera. Es un espacio de aprendizaje. “Este solía ser el lugar en el que los niños aprendían ética y valores morales, donde podrían hablar de injusticias, maltratos y un día duro en el colegio, y los padres enseñarían importantes lecciones. Hoy, ese aprendizaje desapareció detrás de las actividades extracurriculares, la necesidad del doble ingreso y los videojuegos. Las escuelas no enseñan ética ni moral, las iglesias pierden credibilidad y el mundo de los negocios es básicamente inmoral. Entonces, ¿dónde aprenden los niños cómo actuar y llevar vidas productivas como miembros de la sociedad?”, dice el consultor Alan Weiss, ferviente defensor de las cenas familiares. Previene desórdenes alimentarios. “Las madres solas y trabajadoras pueden cocinar la noche anterior, o durante el fin de semana y congelar la comida, para asegurarse una cena saludable. Además, involucrar a los niños en la preparación de la comida no sólo les enseña sobre nutrición, también es un momento de conexión emocional. Hacer cosas juntos permite a los padres conocer a sus hijos y prevenir muchos problemas, como los desórdenes alimentarios”, agrega la doctora Linda Mintle. Fuentes: Health.com - Alan Weiss, consultor organizacional, orador motivacional y autor de, entre otros, The Consulting Bible - Doctora Linda Mintle, psicóloga especialista en terapia familiar, autora del blog Doing Life Together.

Contáctanos