Si te despiertas cansada y la fatiga te acompaña todo el día, es hora de hacer algo al respecto. En el mercado hay una variedad increíble de vitaminas y suplementos que se anuncian como “energy boosters”, pero la Harvard University te recomienda estos 9 tips para lograrlo naturalmente: Controla el estrés. Las emociones inducidas por el estrés consumen enormes cantidades de energías. Prueba hablando con amigos, uniéndote a grupos de apoyo o buscando ayuda psicológica. Las terapias de relajación como la meditación y el yoga también ayudan. Aliviana tus obligaciones. Una de las mayores razones por las que estamos fatigados es la sobrecarga de trabajo. Y esto incluye no sólo tu actividad profesional, sino tu familia y obligaciones sociales. Prioriza y deja de lado las menos importantes. Haz ejercicio. Involucrarte en alguna actividad física (aunque sea una caminata suave) te garantizará un mejor sueño durante la noche, le dará más energía para quemar a tus células y, por lo tanto, circulará más oxígeno por tu cuerpo y provocará la liberación de endorfinas, unas hormonas que te hacen sentir energizada. Evita fumar. Fumar es malo para tu salud pero también te quita energía debido a que causa insomnio. La nicotina es un estimulante, por lo que acelera el ritmo cardíaco, incrementa la presión arterial y estimula las ondas cerebrales responsables de mantenerte despierta.
Restringe tus horas de sueño. Si piensas que te hacen falta más horas de sueño, trata durmiendo menos. Puede sonar raro, pero debes determinar cuánto sueño necesitas para no pasar tiempo en la cama sin dormir. Esto, a su vez, te ayudará a dormirte más rápido y promoverá un sueño más reparador. ¿Cómo hacerlo? No duermas siesta; la primera noche ve a la cama más tarde de lo normal y duerme sólo 4 horas; si sientes que dormiste bien ese período, agrégales otros 15 a 30 minutos la siguiente noche; continúa así mientras duermas bien toda la noche. Aliméntate bien. Es mejor comer pequeñas comidas y snacks cada unas pocas horas que tres grandes comidas al día. Además, consume alimentos con bajo índice glucémico (cuyos azúcares se absorben lentamente, como granos enteros, vegetales altos en fibras, nueces, aceite de oliva) para evitar la falta de energía que ocurre después de comer los almidones refinados. Usa la cafeína a tu favor. La cafeína ayuda a incrementar tu alerta, así es que tomar una taza de café te ayuda a despertarte. Pero debes utilizarla juiciosamente, ya que causa insomnio, especialmente si la consumes después de las 2 pm. Limita el alcohol. El efecto sedativo del alcohol es especialmente fuerte al mediodía y, si quieres tener energía a la noche, evita también el cóctel de las 5 pm. Si vas a beber, hazlo moderadamente y a una hora en que no te importe tener tu energía bajísima. Bebe agua. El agua es el único nutriente con comprobadas propiedades para mejorar el rendimiento para todos y cada uno de las más demandantes actividades. Recuerda: si a tu cuerpo le falta agua, uno de los primeros signos es la sensación de fatiga.
