El cuerpo de una docente que fue estrangulada fue hallado en un suburbio de Buenos Aires y por el asesinato, las autoridades se lanzaron a la búsqueda del principal sospechoso: un hombre de origen mexicano que la víctima había conocido virtualmnente en Facebook y que había llegado desde Ecuador para conocerla.
Se trata de Griselda Noemí González, de 39 años, quien conoció virtualmente a un hombre que se hacía llamar Waldo Mares Parra, de 33 años, según informan varios medios argentinos, además de la agencia de noticias Télam. González estaba en el proceso de divorcio y vivía con una hija de 18 años y un hijo de 15 en la casa que aún compartía con el padre de sus hijos.
En esas circunstancias, la docente entabló hace unas semanas una relación virtual con el hombre a través de Facebook, quien, se supo, radicaba en Guayaquil, Ecuador. Tras varias semanas de contactos virtuales, la docente lo invitó a que visitara Argentina para conocerse en persona, para lo cual le envió el dinero para que comprara el pasaje aéreo.
De acuerdo a Télam, el ciudadano mexicano viajó a Buenos Aires el martes 9 de febrero, previa escala en Chile. En el aeropuerto de Ezeiza, en la capital argentina, el visitante fue recibido por la docente y su hija.
Según relataron varios vecinos, González había alquilado un pequeño departamento cerca de General Rodríguez, un suburbio al oeste de Buenos Aires. El miércoles 10 de febrero, González se fue a dormir a la casa que aún compartía con el padre de sus hijos y al día siguiente regresó al departamento donde estaba alojado Mares Parra.
Una vecina declaró a los responsables de la investigación que la noche del jueves 11 de febrero escuchó una fuerte discusión y gritos que provenían del departamento de González y que más tarde vio salir al sospechoso quien cerró la puerta con candado, de acuerdo a Télam.
Desde la policía se informó que el sábado 13, la hija de González, junto a su padre, acudió al departamento ya que su madre no le había contestado varios mensajes de texto que le había enviado. Cuando sus llamados a la puerta no fueron contestados, contactaron al 911.
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Cuando llegó la policía al lugar, los efectivos ingresaron al departamento por la fuerza y hallaron el cadáver de la mujer que no presentaba lesiones visibles ni signos de violencia.
No obstante, y tras los peritajes de rigor, los investigadores constataron que la docente había muerto por 'asfixia mecánica manual' o estrangulamiento. Se determinó que la víctima presentaba la rotura de un hueso en su cuello, posiblemente por la presión ejercida por un dedo pulgar, según informa la agencia Télam en su página web.
El juez que encabeza la investigación pidió la captura de Waldo Mares Parra quien, al parecer, el fin de semana había dejado Buenos Aires con destino a Uruguay por medio de un ferry que une la capital argentina con Colonia.
La causa fue caratulada como 'homicidio agravado por violencia de género'.
