Grammy Latino: tributo a los maestros

Las Vegas - Risas, ovaciones, aplausos, gran emoción. En una ceremonia en la que abundaron los recuerdos y hubo también una pizca de humor, nueve maestros de la música iberoamericana fueron galardonados por la Academia Latina de la Grabación el día previo a la entrega de los Latin Grammy. El salsero venezolano Oscar D'León, el músico cubano Juan Forrmell, director de la Orquesta Los Van Van; el compositor y productor brasileño Roberto Menescal, la intérprete colombiana Totó La Momposina, el cantante argentino Ramón "Palito" Ortega, el pianista puertorriqueño Eddie Palmieri y cantautor español Miguel Ríos fueron homenajeados con el Premio a la Excelencia Musical; mientras que el conductor chileno de televisión Mario Kreutzberger, más conocido como Don Francisco; y el director musical mexicano Pedro Ramírez Velázquez, recibieron el Premio del Consejo Directivo. "Estoy feliz, muy agradecido. Valió la pena llegar aquí y pelearle a la vida", manifestó Ortega al recibir su gramófono dorado. "Hay mucha gente joven detrás nuestro que viene escribiendo los primeros renglones del pentagrama musical y ojalá que ellos también lleguen", expresó el también compositor y actor tras la exhibición de un video que recorrió con imágenes en color y en blanco y negro sus primeros pasos en el mundo artístico cuando era un adolescente del interior argentino, su carrera como cantante y algunos de sus éxitos, como "La felicidad" y "Yo tengo fe". La ceremonia, que fue conducida por la cantante mexicana Daniela Romo, comenzó con la proyección de un video que rememoró las 10 entregas anteriores de estos premios a figuras como Charly García, Alex Lora y José Feliciano, entre otros. En una sala repleta de invitados en el Hotel Four Seasons de Las Vegas, dos pantallas gigantes ubicadas a cada uno de los lados del escenario mostraban imágenes de la historia de los premios. Hasta ahora, 76 personalidades sobresalientes de la música latina han sido honradas con estos galardones. "El mensaje es claro: gracias, los queremos, los respetamos. Y este es el acto de mayor amor que tiene la organización", dijo a los agasajados de este año el presidente y director ejecutivo de la Academia, Gabriel Abaroa Jr., al comienzo de la ceremonia. El primero en recibir un gramófono fue Don Francisco, quien ha promovido la música y ha ayudado a lanzar las carreras de innumerables artistas a través de su programa "Sábado Gigante", que se transmite desde hace 51 años. "No sé cuánto hay que hablar, pero estoy preparado para hacerlo 45 minutos", fueron las primeras palabras del conductor televisivo chileno, que arrancaron risotadas entre el público. "Vine a recibir este premio a nombre de mucha gente ... hay un gran número de productores que está detrás de las cámaras", añadió Kreutzberger tras indicar que por la importancia del premio no pudo celebrar el cumpleaños 50 de su hijo mayor el miércoles en Chile. Tanto el Premio a la Excelencia Musical como el Premio del Consejo Directivo son otorgados por votación del Consejo Directivo de la Academia Latina de la Grabación. El primero a artistas que han realizado contribuciones creativas de excepcional importancia artística en el campo de la grabación durante sus carreras; el segundo a personas que han realizado importantes contribuciones en el campo de la grabación, pero excluyendo interpretaciones. Antes de recibir su reconocimiento, cada uno de los artistas vio junto al público un pequeño video preparado por la Academia con imágenes que recorrían los pasos más sobresalientes de sus carreras. "La constancia en el trabajo, la generosidad de compartir, la calidad ... son atributos que reúnen todos los premiados de hoy", dijo Luis Cobo, presidente del Consejo Directivo al explicar al inicio de la gala en qué consistían los reconocimientos. De todos los artistas galardonados, el único ausente fue Palmieri. Uno de los momentos más emotivos y paradójicamente más risueños fue cuando D'León, quien perdió la vista de su ojo izquierdo este año, se subió al podio a recibir su premio. Tras destacar su felicidad y dedicar el galardón a su familia y a Venezuela, el salsero dijo con voz medio ronca por la emoción que asumió la pérdida de la vista de ese ojo de manera positiva y recordó que llegó al hospital cantando. "Todos los escenarios son los principales causantes de la emoción que siento en este momento. Esto me llena de un incentivo especial para seguir con eso que ha sido mi carrera", manifestó el salsero vestido con un elegante traje negro, y que por sólo un instante se quitó los anteojos oscuros para mostrar su ojo.

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