MÉXICO - El grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que estudia el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en México alertó este domingo de la filtración de testimonios, algunos incluso falsos, y de la fragmentación del expediente del caso Iguala dentro de la Fiscalía general, lo que dificulta el avance en las investigaciones.
"La filtración de declaraciones sigue siendo un factor que genera confusión, pues generalmente se trata de informaciones que no han sido contrastadas. (...) De igual manera, muchas de estas filtraciones no responden a la verdad de lo que se dijo en las declaraciones", dijo en rueda de prensa la experta Claudia Paz.
Para el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) esto genera que incluso en procesados cuyas declaraciones se habían "reservado totalmente" los medios terminen publicando declaraciones en "sentido contrario".
El grupo de expertos de la CIDH también informó a la titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Arely Gómez, y a la Subprocuraduría especializada en investigación de delincuencia organizada (SEIDO) de que estas filtraciones suponen "un obstáculo para la integridad de la investigación".
Además, en el marco de su segundo mandato - que expira en abril- para investigar los sucesos acontecidos el 26 de septiembre de 2014 en el municipio de Iguala, en el sureño estado de Guerrero, el GIEI ha solicitado el acceso a todas las averiguaciones previas abiertas en estos meses con información relativa al caso y hechas sin su conocimiento.
"Muchas filtraciones ponen a presuntos inculpados diciendo cosas que no corresponden con los elementos que están en las declaraciones", denunció la experta colombiana Ángela Buitrago.
Ello podría deberse a unas filtraciones manipuladas o a que el presunto responsables dio declaraciones distintas en otras cosas por los que también se le está investigando.
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En este aspecto, los expertos de la CIDH denunciaron este domingo la "fragmentación interna del expediente y la investigación" de los hechos acontecidos en Iguala.
Y es que a medida que las pesquisas han avanzado dentro de la Subprocuraduría de Derechos Humanos, que lleva el caso y donde se enmarca la unidad especializada en la investigación del suceso, se han abierto "otras averiguaciones previas" por parte de la SEIDO.
Ello "ha supuesto la práctica imposibilidad de acceder a informaciones relevantes en el caso", denunciaron los expertos en un mensaje conjunto.
Por ejemplo, las declaraciones de Gildardo López Astudillo "el Gil", presunto miembro del cártel Guerreros y autor material de la desaparición de los jóvenes, no se encuentran en el expediente del caso, sino "en nuevas averiguaciones previas abiertas por la SEIDO y a la que el GIEI no ha tenido acceso".
Ello se solucionaría mandando "copias certificadas" al GIEI todas las investigaciones relacionadas con los normalistas.
El 26 de septiembre de 2014, los 43 jóvenes de la escuela normal Rural de Ayotzinapa desaparecieron en Iguala a manos de policías corruptos y miembros del cártel Guerreros Unidos, quienes, según la cuestionada versión oficial, los asesinaron y quemaron en un basurero cercano.
Esa noche también murieron seis personas y 25 resultaron heridas por el fuego abierto de los policías de Iguala.
