INDIANÁPOLIS — Los senadores de Indiana aprobaron el viernes una medida para dirigir fondos hacia programas que ayudan a mujeres embarazadas, niños y personas que adoptan durante una sesión especial dividida en la que los legisladores han estado discutiendo sobre una propuesta para prohibir casi todos los abortos en el estado.
El proyecto de ley de gastos de los republicanos del Senado, que fue aprobado 46-1, asigna $45 millones más en el próximo año a las agencias estatales que “apoyan la salud de las mujeres embarazadas, las madres en posparto y los bebés”, especialmente entre las familias de bajos ingresos. Los servicios integrales estarían disponibles para familias con niños menores de 4 años y vienen con una expansión estimada de $5 millones en créditos fiscales por adopción.
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Solo en su disidencia estuvo el líder demócrata del Senado, Greg Taylor, quien dijo que, si bien cree que es importante enviar asistencia a las familias necesitadas, desembolsar los fondos a través de la agencia presupuestaria del estado “no es fiscalmente responsable”.
“Enviar $45 millones a la agencia de presupuesto no hace llegar el dinero a la gente”, comentó antes de votar. “Lo pone en un fondo que le permite a la agencia de presupuesto determinar quién lo recibe y adónde va”.
La Cámara tiene previsto votar un proyecto de ley similar más tarde el viernes.
La votación final del Senado tuvo lugar unas 10 horas después de que la Cámara dominada por los republicanos se negara a eliminar las excepciones para las víctimas de violación e incesto en la propuesta sobre la prohibición del aborto. Indiana se encuentra entre los estados controlados por el Partido Republicano que se mueven rápidamente para restringir o prohibir aún más el aborto después de que la Corte Suprema de los Estados Unidos anuló la histórica decisión Roe vs. Wade.
Los legisladores terminaron pasada la medianoche debido a un retraso de aproximadamente cinco horas en la sesión del jueves, y las restricciones del Senado prohibieron a los legisladores votar sobre la prohibición el viernes. Ahora se espera la votación del Senado el sábado, y la Cámara podría retomar la propuesta la próxima semana.
En cuanto a la propuesta de gastos, los republicanos han dicho que muestra dedicación a las madres y los bebés, mientras que los demócratas argumentaron que el dinero no es suficiente para los servicios que tendrán una mayor demanda si se aprueba la prohibición del aborto.
El senador republicano Travis Holdman calificó el proyecto de ley como “un comienzo” y abordó los pedidos de los demócratas de financiación para la salud mental en el proyecto de ley.
“Tenemos una sesión de presupuesto completamente nueva aquí en enero, y esperamos poder complementar algunos de los fondos y responder como deberíamos a la situación de salud mental y las necesidades de las madres jóvenes, las mujeres embarazadas y los niños pequeños”, sostuvo Holdman.
Dos veces en los últimos años, los legisladores republicanos rechazaron el llamado del gobernador republicano Eric Holcomb a favor de una ley que exigiera que las empresas brinden acomodos en el lugar de trabajo a las mujeres embarazadas.
Los partidarios de proyectos de ley anteriores, como disposiciones para otorgar a las trabajadoras embarazadas descansos más largos o transferencias a menos trabajo físico, dijeron que mejorarían la tasa de mortalidad infantil de Indiana. Las estadísticas federales muestran que el estado tuvo el noveno peor estado del país en 2020, con 527 muertes infantiles.
Una enmienda al proyecto de ley de servicios integrales aprobada el jueves requiere que las oficinas estatales investiguen las tasas de reembolso de Medicaid de los estados vecinos para los servicios relacionados con el embarazo, con un informe requerido antes del 31 de diciembre de 2022.
Los líderes legislativos han reconocido que la prohibición del aborto podría aumentar el Medicaid del estado y otros gastos. La prohibición de la mayoría de los aproximadamente 8,400 abortos realizados en Indiana en 2021 agregaría un número desconocido a los nacimientos del estado, de los cuales aproximadamente 80,000 ocurrieron el año pasado, según el Departamento de Salud del estado.
