Se viven caóticos momentos en vecindarios al oeste de Chicago ante los violentos saqueos del fin de semana, este lunes tanto residentes como propietarios de negocios dicen que se están preparando en caso de que vuelvan a estallar disturbios la noche del lunes.
En el vecindario de Belmont-Cragin varios negocios del centro comercial Brickyard Mall fueron el blanco de los saqueadores quienes rompieron todo a su paso para robar artículos.
Este lunes el centro comercial se mantiene cerrado mientras que agentes de policía están vigilantes y bloqueando el acceso a las tiendas hasta nuevo aviso.
En el vecindario de Austin, la situación es la misma: negocios y tiendas completamente destruidas y hasta quemadas.
“No hay razón para saquear. No hay razón para destruir las tiendas. Nadie está pensando en los niños, no podrán tener acceso a comida ya que los negocios van a estar cerrados”, dice Rubén Cintrón, un residente de la zona que se unió a las labores de limpieza de escombros que los manifestantes dejaron atrás.
Mientras tanto, algunos propietarios de negocios pequeños como Patricia Olivares de la Panadería Luna en el vecindario dicen que se están preparando para lo peor.
“Lo que está pasando es lamentablemente muy feo, nosotros cerrando temprano, no tenemos nada de valor aquí, estamos bajando las cortinas del negocio”, dice Olivarez
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Aunque su negocio no ha sido afectado por hechos violentos, Olivares teme que los saqueos continúen en su vecindario.
“Las personas se están metiendo ya hasta en las casas y uno tiene miedo. Si se meten a tu negocio cuanto más a tu casa”.
Durante horas de la tarde del lunes, los disturbios en la zona persisten y agentes de policía tuvieron que dispersar a un grupo de personas que había ingresado a otra tienda.
