Asesinatos, agresiones sexuales, robos, balaceras, ¿qué piensa hacer Brandon Johnson para detener estos delitos? Uno de los planes del alcalde electo de Chicago es invertir para prevenir. Asegura que duplicará a más de 60 mil los empleos de verano.
“Creo que lo que el alcalde quiere hacer es enfocarse en la prevención y lo que es la raíz de la violencia”, dijo Maralea Negrón, directora de política pública de la ONG The Network.
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La inversión también incluye construir lo que él ha llamado una red de respuesta al trauma. “Nosotros estamos bien interesados en lo que él quiere hacer con los centros, pero queremos que los centros tengan un enfoque específicamente de violencia doméstica y de consejería”, agregó Negrón.
En cuanto a las dificultades que tiene la policía para dar respuesta a todas las llamadas que se generan cada día, Johnson expresó:
“El plan de seguridad pública que tengo es promover la formación de detectives para que podamos resolver los delitos y aliviar así la presión de las fuerzas del orden”.
Sin embargo, para algunos esa matemática no es tan sencilla. “Es sacar 200 oficiales de las patrullas, que es donde los necesitamos, en las calles. Así que serían 1400 agentes menos en el departamento”, dijo Garry Mccarthy, exsuperintendente de la policía de Chicago.
Johnson plantea sacar oficiales de la policía de las llamadas de emergencias de salud mental. “Tenemos que asegurarnos de prestar apoyo en primera línea y para poder aliviar la presión de los oficiales para que puedan ocuparse de delitos graves”, dijo el nuevo alcalde.
Pero Mccarthy es radical al expresar que la medida podría terminar con agresiones en contra de trabajadores sociales. El plan de seguridad de Johnson también plantea desconectar el servicio de detección de disparos, conocidos como shotspotter, así como la eliminación de las bases de datos de pandillas de Chicago porque las considera racistas.
“Si hay problemas con la base de datos de pandillas, arréglala, pero no la elimines”, dijo el exsuperintendente.
Una de las piezas fundamentales del plan de Johnson, aún no ha sido revelada, y es a quién designará como superintendente de policía.
En este funcionario recaerá gran parte de la responsabilidad de que Chicago vuelva a ser una ciudad más segura. Esto depende a su vez, del liderazgo que ejerza el nuevo alcalde y su equipo.
