Ha llegado el Miércoles de Ceniza y, como es de costumbre, fieles estarían acudiendo a las iglesias para recibir este gesto sacramental.
“Es un símbolo”, dijo el padre Michael Enright, párroco en la iglesia San Pablo ubicada en Pilsen. “Un recordatorio que vamos a morir un día y que nos vamos a convertir en polvo otra vez”.
Sin embargo, lo que sí es diferente esta vez es la preocupación que algunos dicen tener sobre lo que autoridades están llamando "una inevitable pandemia del coronavirus".
"Si me preocupa mucho”, dijo Rosa Maria Moreno, feligresa de la iglesia San Pablo. “Pero mientras este todo así controlado, pues venimos. Pero sí hubiera una pandemia, no sé”.
El párroco de la iglesia San Pablo asegura que ya están empezando a discutir algunas precauciones que tomarían en caso de que el nuevo coronavirus, o Covid-19, se propague.
“Tal vez cambiamos unas cosas “, dijo Enright.
Algunas de esas medidas preventivas incluyen posiblemente cambiar la forma en la que dan la comunión a los feligreses, agregó Enright, ya que las normas requieren que ellos tomen del mismo cáliz.
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Independiente de esto, algunos fieles dicen que seguirán asistiendo a misa, y como es de costumbre, estarán haciendo un sacrificio en honor a la cuaresma.
“Dejar de hacer cosas que dañen a los demás”, dijo Mirella Escobar, feligrés de la iglesia San Pablo.
Cabe resaltar que las cenizas pueden ser recibidas por personas que no sean católicas.
“Ojalá que todos de una forma u otra reciban un toque de la gracia de Dios este día,” dijo Enright.
