Cuando Or Sella finalmente se reunió con sus primas Judith y Natalie Raanan, residentes de Evanston que estuvieron cautivas de Hamás durante casi dos semanas, los abrazó estrechamente.
"Fue el abrazo más intenso que jamás haya sentido", dijo Sella.
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Y aunque los miembros de la familia estaban tremendamente aliviados de tener de vuelta a los Raanan, Sella dijo que otros siete familiares, incluyendo un niño de 3 años, continúan cautivos en Gaza. Tres miembros adicionales de su familia fueron asesinados por militantes de Hamás en el ataque del 7 de octubre que desencadenó el conflicto actual.
El miércoles, Sella y otras dos familias de Israel cuyos seres queridos fueron asesinados o capturados por Hamás asistieron a una vigilia en la sinagoga Anshe Emet en el norte de Chicago, pidiendo el regreso seguro de los más de 240 rehenes que están siendo retenidos por Hamás.
"Estamos hablando de ciudadanos estadounidenses, estamos hablando de familias de seres humanos que creen en la libertad, creen en la paz, y nadie debería ser rehén de una organización terrorista", dijo Sella.
"Ningún niño de 3 años debería ser tomado como rehén por una organización terrorista. Como seres humanos, todos deben hacer todo lo posible para traerlos de vuelta a casa".
Unas cientos de personas se congregaron en la sinagoga de Lake View para la vigilia, que fue organizada por el Jewish United Fund de Chicago.
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"Estamos aquí para expresar nuestro dolor, nuestro horror y nuestra indignación al mundo, y lo hacemos con una sola voz", dijo David Golder, presidente de la junta directiva de JUF Chicago, durante la vigilia.
"Esta noche, añadimos nuestras voces a las suyas, exigiendo el regreso seguro de las más de 240 personas que están confirmadas como rehenes de los terroristas de Hamas".
La delegación de familias israelíes aterrizó en Chicago el martes por la noche y se reunió con una docena de legisladores del estado de Illinois para compartir sus historias, según el consulado general de Israel en el Medio Oeste.
Los Raanan estaban en Israel para celebrar el cumpleaños 85 de la madre de Judith Raanan y la abuela de Natalie, y para conmemorar Simchat Torah, la festividad judía que marca la conclusión del ciclo anual de lecturas de la Torá. Estaban hospedados en Nahal Oz, un kibbutz cerca de la frontera de Gaza, cuando fueron tomados como rehenes.
Natalie Raanan llegó a Chicago desde Israel el lunes sin su madre. Amigos han dicho que Judith Raanan, de 59 años, rehúsa dejar a su anciana madre.
Sella y su prima Dafna Sella dijeron que las dos mujeres están bien físicamente, pero se negaron a dar una actualización más detallada, diciendo que la madre y la hija "necesitan tiempo para sanar" antes de que puedan hablar sobre sus experiencias.
Dafna Sella compartió algunos detalles sobre uno de los miembros de su familia asesinados, Lilach Kipnis, diciendo que era trabajadora social y psicoterapeuta que "trabajó en favor de los palestinos y dedicó su vida al tratamiento del trauma en niños".
Dafna Sella dijo que los Raanan no supieron que otros miembros de su familia habían sido asesinados y tomados como rehenes por Hamás hasta que fueron liberados. Or Sella dijo que siente que los atacantes que asaltaron a su familia "se llevaron mi infancia", ya que tiene buenos recuerdos de crecer juntos en Israel.
Más de 1,400 personas en Israel han sido asesinadas, la mayoría de ellas civiles, en el ataque inicial de Hamás el 7 de octubre que desató el conflicto.
Hamás ha dicho que liberaría a los más de 200 rehenes a cambio de miles de prisioneros palestinos retenidos por Israel, oferta que Israel ha rechazado. En los ataques de represalia de Israel, 8,805 palestinos han muerto, según el Ministerio de Salud de Gaza dirigido por Hamás.
Shani Segal, cuyo primo Rimon Kirsht y su esposo fueron tomados por Hamás, también voló desde Israel para hablar en nombre de su familia en la vigilia.
"No debemos permitir que los civiles sean sacados de sus hogares; los rehenes deben ser liberados de inmediato", dijo Segal. "Queremos que todo el mundo esté a nuestro lado y libere a los rehenes. No debemos permitir que el terror triunfe".