El presidente Joe Biden anunció el miércoles, un nuevo plan para combatir la violencia y el control de armas en el país que permitiría a los gobiernos locales utilizar fondos del paquete de estímulo económico para combatir el crimen en las calles.
El plan de Biden que consiste en cinco partes que van desde detener el flujo de armas ilegales, crear nuevos empleos y oportunidades para invertir en las comunidades, pero concejales y un expandillero de Chicago dicen que no será suficiente.
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Según Berto Aguayo expandillero y fundador de la organización “Increase the Peace”, el plan del presidente Biden es una buena dirección, pero que para combatir la violencia callejera se debe de comenzar con la raíz del problema.
“Así como todo el gobierno de la ciudad, el estado y los federales se unieron para combatir la pandemia del COVID-19, también tienen que unirse para combatir la pandemia de la violencia en nuestras calles”, recalca Aguayo.
La propuesta de Biden permitiría a los gobiernos estatales y locales desviar hasta $350 mil millones del último paquete de estímulo económico para contratar más policías o entrenamiento, creación de empleos, programas para jóvenes, de educación y prevención de la violencia, entre otros.
“Invertir fondos en estos programas significa apoyar a ambos, los oficiales de policía y también a programas sociales que ayuden a prevenir la epidemia de la violencia callejere”, dijo Tammy Duckworth, senadora federal por el Distrito 8 de Illinois.
En Chicago en lo que va del 2021, el crimen ha aumentado dramáticamente. De acuerdo con el departamento de la policía las balaceras, las victimas de tiroteos y los asesinatos han aumentado en más de un 15%.
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“La prevención viene de poder darle los recursos que la gente necesita, darle opciones particularmente a los jóvenes joven. Eso no lo estamos haciendo en la capacidad que deberíamos, yo espero que con ese dinero podamos invertir más en la prevención de la violencia”, afirma Rossana Rodríguez, concejal del Distrito 33 de Chicago
El plan del presidente Biden también incluye ayudar a personas con historial criminal o que estuvieron en las cárceles a que se reincorporen en la comunidad.
Específicamente, el gobierno de Biden tiene previsto dar ayuda de vivienda a algunos exreclusos y dar incentivos fiscales a empresas que contraten a un expreso en los primeros 12 meses de su salida de la cárcel.
Biden también anunció una política de "tolerancia cero" contra aquellos comerciantes de armas que están acreditados a nivel federal y que incumplen la ley, por ejemplo, vendiendo una pistola en el mercado negro.
Por último, el mandatario quiere usar parte del presupuesto del próximo año fiscal, que aún tiene que aprobar el Congreso, para que haya un agente especializado en armas de fuego en todos los departamentos de policía del país.
Aunque el plan dependerá de paquete de estímulo inicialmente, el presidente continuaría pidiendo al Congreso que invierta $5,000 millones en programas de intervención de violencia comunitaria, según un funcionario.
LAS 5 PARTES DEL PLAN DE BIDEN CONTRA LA VIOLENCIA ARMADA
- Detener el flujo de armas utilizadas para cometer actos de violencia, incluso responsabilizando a los comerciantes licenciados por violaciones intencionales de la ley.
- Apoyar a la policía local con herramientas y recursos federales para ayudar a abordar los delitos violentos durante esta temporada de verano.
- Invertir en intervenciones basadas en pruebas para combatir la violencia comunitaria
- Ampliar programas de verano, las oportunidades de empleo, y otros servicios y apoyos para adolescentes y adultos jóvenes.
- Ayudar a las personas anteriormente encarceladas a reincorporarse con éxito a sus comunidades.
