En busca de la paz y justicia al medio día de hoy residentes de Chicago marcharon por la zona de Near West Side.
Estos justo a un día de que la policía de Chicago indicara que tiene bajo custodia a una persona de interés relacionada al crimen del pequeño Jai’mani Rivera y esta tarde se espera que se presenten cargos.
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A una sola voz demandaban: “Queremos justicia”.
Unidos por la conmoción y compartiendo el mismo dolor de perder a un ser querido, residentes de Chicago marcharon por la paz este viernes.
“El año pasado, el 9 de mayo, mi hija fue asesinada. Nicole Watson, y su hijo Jacob fue severamente herido; fue baleado en la cabeza dos veces”, dijo Paul Watson.
Ahí también se dieron cita los familiares del pequeño Jai’mani Rivera quien el martes fuera víctima de las balas. Su primo de tan solo 10 años tuvo la valentía de hablar ante los medios y pedir unión a favor de la paz.
“No me siento bien, pero no estoy llorando. Fue una experiencia muy impactante y estoy muy herido”, dijo Joel Rivera, quien describió a su primo como chistoso y con mucha energía.
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Activistas también se hicieron presentes y hablaron de la importancia de buscar ayuda para combatir la zonas más afectas por la violencia
“Estamos ahí para ayudar a la comunidad y a las familias que han sido afectadas y estamos aquí para apoyar porque nos afecta a todos. La violencia de las armas afecta a toda la comunidad”, dijo Mazell Skyes, de Community Healing Resourses.
A la vez otros hicieron un llamado a la comunidad en general a crear conciencia y alzar la voz en contra de la violencia.
“Esta no será la última marcha, estamos pidiendo por paz en toda la ciudad les estamos pidiendo a todos los hombres que se levanten para que haya un acuerdo de paz en toda la ciudad”, señaló Saleshea Peterson, fundadora de Hug a Child Make a Change.
Y no es para menos ya que, según datos proveídos por la policía de Chicago, solamente en este año 127 menores de edad han sido víctimas de las balas , de los cuales 17 murieron.