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A pesar que el fenómeno del béisbol Eloy Jiménez sólo tiene 24 años, ya ha alcanzado logros para una vida entera. Desde jugar en las grandes ligas del béisbol (MLB en inglés) después de años de trabajo duro hasta hacer historia en el deporte, la estrella dominicana ha enamorado a muchos fanáticos de Chicago a través de los años.
Sus primeros años
Aunque sus compañeros de equipo hoy lo llaman el “Babe Ruth” de su generación, el jugador no se enamoró inmediatamente del deporte. De hecho, la primera vez que pisó la cancha en Santo Domingo a los 9 años, lo golpeó una pelota en la cara. Después de este incidente, Jiménez estaba listo para dejar el deporte y seguir con el básquetbol. Afortunadamente para los fanáticos de las grandes ligas, el padre de la estrella dominacana lo animó a seguir. El resto es historia.
Persiguiendo el sueño americano
Casi 10 años después de batear una pelota por primera vez (y asimismo, que una pelota lo bateara a él), el nombre de Jiménez empezó a hacerse más conocido al convertirse en el primer prospecto internacional en la MLB. Con tan sólo 17 años, se unió a las ligas menores de los Chicago Cubs con una bonificación al firmar de $2.8 millones, y se mudó a los Estados Unidos para perseguir su sueño de béisbol.
Un año después, Eloy debutó profesionalmente con los Arizona League Cubs. Aunque tanto su rendimiento como sus apariciones se vieron limitadas por una lesión en el hombro, los scouts no perdieron la confianza en las habilidades de Jiménez por su corta edad (apenas tenía 18 años) y gran estado físico. Jiménez les dio la razón al seguir avanzando hacia las grandes ligas, empezando la temporada con los South Bend Cubs y terminándola con los Mesa Solar Sox de Arizona. Para agregar a su lista de logros, lo nombraron MVP (jugador más valioso) de la liga del Medio Oeste en el 2016 y el prospecto del año en agosto del mismo año.
Haciéndose un nombre en Chicago
Aunque comenzó la temporada del 2017 con los Myrtle Beach Pelicans, el nativo de Santo Domingo junto a tres otros Cubs, fueron fichados para los Chicago White Sox. Este cambio resultó en un impacto drástico en su carrera y lo moldeó en el jugador que hoy conocemos.
Chicago White Sox ascendió a Jiménez a su alineación de 25 en el 2019, y éste firmó un contrato de 6 años por $43 millones con el equipo. En ese momento, era el contrato de MLB más rico para un jugador sin experiencia previa en las grandes ligas. Jiménez terminó su primer año professional ganando el premio al jugador de la semana de la Liga Americana (del 9-15 de septiembre), y el premio al novato del mes en septiembre. También se convirtió en uno de solo 11 jugadores de la MLB en hacer más de 30 home runs en su primera temporada, como también fue el tercer rookie de los White Sox en anotar esta misma cantidad de home runs en una temporada.
Quedando en la historia como el primer jugador de Chicago White Sox en portar el número 74, Jiménez siguió creciendo, y ganó su primer Slugger de plata en el 2020, premio que se le otorga anualmente al mejor jugador ofensivo en cada posición de las Ligas Americana y Nacional. Jiménez terminó esta temporada con 14 home runs y 41 RBI (carreras impulsadas).
Este año, a pesar de sufrir una lesión pectoral en marzo que acortó su temporada, Jiménez una vez más demostró su resiliencia reanudando sus actividades de béisbol antes de lo esperado, a mediados de junio. Tan sólo unos meses después de regresar, Eloy hizo historia nuevamente al convertirse en el primer White Sox en hacer 2 home runs y 5 RBIs consecutivos.
Aparte de su carrera, Jiménez es conocido por su divertida personalidad y lo cercano que es con su familia, en especial su mamá. Los fanáticos de Chicago probablemente ya lo han visto saludar a la cámara más de una vez en un juego o entrevista, diciendo “Hi Mom” (hola mamá en inglés). Cuando le preguntaron por este hábito, Jiménez simplemente respondió que lo hizo una vez, y desde entonces el gesto se ha quedado. A través de esta única colaboración con Lids, Eloy puede celebrar sus logros junto aquellos que lo han ayudado en el camino.
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