Una nueva encuesta revela cuál de las 16 ciudades más grandes de EEUU los estadounidenses creen que es segura, y parecía que a Chicago no le fue bien en la lista.
La encuesta Gallup, que preguntó a al menos 1,000 adultos estadounidenses durante el mes de julio si consideraban que varias ciudades "son seguras para vivir o visitar", independientemente de si las han visitado, encontró que Chicago ocupaba el puesto más bajo, sólo detrás de Detroit.
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Según la encuesta, sólo el 27% de los encuestados dijeron que creen que la ciudad es segura, seguida por el 26% de Detroit.
Mientras tanto, en ciudades como Dallas y Boston el 74% y el 72% de los encuestados, respectivamente, se consideraron seguros, según la encuesta.
Por encima de Chicago en el ranking estaban Los Ángeles y Nueva York, en las cuales el 41% de los encuestados dijeron que creen que esas ciudades son seguras.
La clasificación marca un gran cambio en la percepción de la seguridad de Chicago en comparación con una versión anterior de la encuesta realizada en 2006. Entonces, el 47% de los encuestados dijeron que creían que la ciudad era segura.
La última cifra está más en concordancia con la calificación de la ciudad en 1990.
"Entre 1990 y 2001, la percepción de los estadounidenses de Chicago como una ciudad segura aumentó al 53%, nivel donde permaneció hasta que cayó ligeramente en 2006", señaló Gallup.
La encuesta señaló, sin embargo, que las inclinaciones políticas pueden haber impactado las opiniones de los encuestados.
Al observar a los encuestados que se consideran demócratas o independientes de tendencia demócrata, el 41% informó que cree que la ciudad es segura. Eso se compara con sólo el 11% de los republicanos o independientes de tendencia republicana.
"Con la excepción de Dallas y Miami, los demócratas y los independientes de tendencia demócrata tienen sustancialmente más probabilidades que los republicanos y los independientes de tendencia republicana de percibir cada ciudad como segura", señaló Gallup.
"En promedio, la brecha partidista actual en las 16 ciudades es de 29 puntos porcentuales, mucho mayor que la brecha de dos puntos en la encuesta de 2006".
Aun así, Chicago y Detroit fueron las únicas ciudades de la lista donde la mayoría de los demócratas no creía que la ciudad fuera un lugar seguro para vivir o visitar.
Chicago se encuentra actualmente en medio de la transición hacia un posible nuevo superintendente de policía y han transcurrido poco más de tres meses desde el mandato del nuevo alcalde Brandon Johnson.
La seguridad pública estuvo entre las principales preocupaciones citadas por los votantes en el período previo a la elección de Johnson, en la que prometió promover a 200 nuevos detectives.
"Estamos trabajando para lograrlo", dijo Johnson en una entrevista reciente con NBC Chicago. "Escuchen, tenemos una confirmación que llegará pronto con un nuevo superintendente de policía, por lo que estamos reuniendo a todas nuestras partes interesadas para asegurarnos de que tengamos una vigilancia constitucional real e inteligente, que conduzca hacia el tipo de inversiones que se van a realizar". Es necesario para garantizar que se alcance plenamente la seguridad pública utilizando toda la fuerza del gobierno”.
Un informe reciente de The Associated Press indicó que el número de asesinatos y tiroteos en Chicago en lo que va de 2023 se ha reducido en ambas categorías en un 5% y un 10%, respectivamente, según las estadísticas criminales más recientes del departamento. Sin embargo, las tasas generales de delitos graves han aumentado un 35% en lo que va de año con respecto a 2022.
"La seguridad en esta ciudad tiene que ser un esfuerzo colectivo, que trascienda las cuadras y los vecindarios", dijo Larry Snelling, el esperado nuevo superintendente de policía de Chicago. "Es fundamental que compartamos la responsabilidad entre las fuerzas del orden, los departamentos de la ciudad y las agencias hermanas, el gobierno local, nuestros socios federales, nuestros residentes y líderes comunitarios".
