Funcionarios de salud de Illinois y Chicago expresaron su preocupación por un aumento reciente en los números coronavirus que podría indicar otro oleaje potencial en la ciudad y el estado.
La comisionada del Departamento de Salud Pública de Chicago, la Dra. Allison Arwady, dijo que las tendencias actuales, particularmente entre adultos jóvenes, son similares a las observadas antes del aumento repentino en el otoño que obligó a medidas de mitigación en el país, la ciudad y el estado.
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"Desafortunadamente, este tipo de aumentos son justo lo que estábamos viendo en octubre, cuando comenzamos a observar los comienzos de lo que se convirtió en otra oleada", dijo Arwady este martes. "Fueron realmente las mismas tasas de casos y los adultos más jóvenes los que comenzaron esto".
La tasa de positividad de la ciudad se ubicó en 3.2% este martes, permaneciendo en la categoría de bajo riesgo, pero marcando un aumento desde un mínimo reciente de 2.7%, según Arwady.
Asimismo indicó que aún más preocupante es que el recuento de casos en la ciudad también está comenzando a aumentar, con un promedio de 350 casos por día, en comparación con 285 una semana antes.
Arwady indicó que si bien el nivel de casos actual permanece en una categoría de riesgo moderado, la tasa de aumento pone a la ciudad bajo un riesgo mayor.
En las últimas 24 horas, se registraron 1,832 casos adicionales de coronavirus y 13 muertes. Además, se administraron junto más de 70,000 vacunas.
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Arwady señaló que las variantes del coronavirus, que se cree que son más contagiosas, todavía se están reportando en la ciudad.
El 5 de marzo, el Departamento de Salud Pública de Chicago detectó el primer caso de la variante brasileña COVID-19, que también marcó el primer caso de este tipo en Illinois.
El primer caso de la variante descubierta por primera vez en Sudáfrica se detectó el 11 de febrero, mientras que la cepa del Reino Unido se registró en Chicago el 15 de enero.
Arwady dijo que es optimista respecto a las proyecciones a largo plazo.
"Estoy segura de que este verano, suponiendo que sigamos viendo una mayor demanda y aceptación de la vacuna, estaremos en buena forma, pero estoy preocupada por lo que pase en cuatro a ocho semanas ", dijo.
