Mientras casi 50,000 solicitantes de asilo llegaban a la frontera sur tan sólo en los últimos cuatro días, el alcalde de Chicago, Brandon Johnson, se unió a dos de sus contrapartes para presionar una vez más por asistencia federal adicional ante la situación actual.
Johnson estuvo acompañado por el alcalde de Nueva York, Eric Adams, y el alcalde de Denver, Mike Johnson, para trabajar en la coordinación de estrategias en medio del flujo constante de migrantes, que están siendo transportados desde Texas a numerosas ciudades en todo Estados Unidos.
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"Necesitamos que el gobierno federal se incline y brinde más asistencia financiera", dijo Brandon Johnson. Todas nuestras ciudades han llegado al punto en el que estamos cerca de la capacidad o casi sin espacio”.
Los funcionarios federales dicen que un número récord de migrantes cruzó la frontera durante la última semana, y casi 50,000 lo hicieron en un lapso de cuatro días.
Los funcionarios de Chicago, Nueva York y Denver anticipan aún más llegadas en los próximos días.
"Esperamos que el aumento se intensifique en los próximos días y semanas", dijo Adams. "Pedimos una declaración federal de emergencia, apoyo financiero y una estrategia nacional de reasentamiento".
Según los últimos datos publicados por la ciudad, Chicago alberga a más de 14,000 solicitantes de asilo en 27 refugios.
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"El bien público ya está bajo presión", dijo Johnson.
En total, los tres alcaldes dijeron que han visto llegar a más de 80,000 solicitantes de asilo desde agosto de 2022.
La administración del gobernador de Texas, Greg Abbott, también ha comenzado a fletar vuelos privados para transportar a solicitantes de asilo a ciudades del norte. Recientemente, un avión llegó sin previo aviso al Aeropuerto Internacional O'Hare y el personal del vuelo huyó del avión tan pronto como aterrizó.
También han entrado en vigor los nuevos requisitos impuestos por Chicago a la llegada de autobuses, con algunos autobuses parando en comunidades suburbanas en lugar de llegar a la propia Chicago, lo que causa estragos en muchos municipios.
"La ciudad de Chicago se está moviendo rápidamente para encontrar refugio para los solicitantes de asilo que llegan desde la frontera. En los últimos días, varios autobuses deshonestos llegaron durante el fin de semana de Navidad transportando hasta 500 solicitantes de asilo por día, y los dejaron en lugares aleatorios en el área de Chicago en violación de los protocolos de seguridad establecidos por la ciudad", dijo la oficina del alcalde en un comunicado.
Según funcionarios, 95 autobuses han sido citados por violar una ordenanza de la ciudad que exige requisitos específicos para la entrega de solicitantes de asilo. También se han incautado dos autobuses.
Johnson dijo que Chicago está haciendo solicitudes adicionales de recursos y camas para los recién llegados, y la ciudad está buscando más inversiones federales para ayudar con el aumento de llegadas, según el comunicado.
Todos los últimos casos han llevado a los alcaldes a renovar sus pedidos de apoyo federal adicional.
"Necesitamos que el gobierno federal invierta, pero también debemos asegurarnos de que el gobernador de Texas no descargue su animosidad con el resto del país", dijo Johnson.