Un oficial fue baleado la mañana del sábado al sur de Chicago y tras una búsqueda intensa, lograron captar al sospechoso quien fue considerado "armado y peligroso", según informes.
El incidente ocurrió en la cuadra 6500 de South Winchester Avenue alrededor de las 8:40 a.m., según la policía.
Durante una conferencia de prensa, las autoridades confirmaron que un par de oficiales llegaron a una casa en Englewood, en donde se creía que el sospechoso se escondía. De acuerdo con el portavoz del departamento de policía de Chicago, Anthony Guglielmi, cuando el sospechoso intentó huir la escena, se enfrentó a la policía y allí fue donde "se produjo una altercación física".
El oficial de 48 años fue trasladado al Advocate Christ Medical Center, dijeron las autoridades, donde lo sometieron a cirugía.
Unas horas después, la policía confirmó que el sospechoso era el mismo que buscaban en conexión al incidente del miércoles pasado, en donde una mujer fue baleada en Fulton River District.
Se trata de Michael Blackman de 45 años, indicó Guglielmi, quien tiene una extensa historia criminal, comenzando desde 1991.
Las autoridades luego dijeron que se enfrentaron ante Blackman de nuevo alrededor de 3:40 p.m. Allí fue cuando, durante un intercambio violento, recibió varias balaceras y fue trasladado al Advocate Christ Medical Center en condición crítica.
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Según la cirujana de trauma Jane Kayle Lee, el oficial que, con 16 años de experiencia con la policía de Chicago, recibió varios disparos, una herida de bala en la ingle izquierda, donde se retuvo una bala y otros dos disparos en la pierna izquierda inferior.
Perdió una gran cantidad de sangre, "básicamente desangrándose", dijo Lee, e inmediatamente lo llevaron a la sala de cirugía donde se sometió a una transfusión de sangre y fue evaluado por las heridas que causaron fracturas y rasgaduras significativas en una de las venas principales de la pierna.
Aunque el oficial permanece en condición estable, se espera que se someta a más pruebas quizás tenga otras cuantas cirugías.
En la conferencia de prensa, Lori Lightfoot agradeció a todos los oficiales y socorristas por arriesgar sus vidas para proteger a los residentes de la ciudad.
"Corren al peligro para protegernos", dijo Lightfoot. "Pido que todo Chicago continúe orando por el oficial y su familia durante su recuperación".
