Sor Margarita Chávez Vélez, visita Chicago y sus alrededores desde Ecuador y tiene una misión especial.
Lleva a cabo una colecta para ayudar a la clínica Charles Borromeo en un poblado de las afueras de Quito, la capital de Ecuador.
La clínica para familias de bajos recursos comenzó gracias a la labor misionera de un grupo de residentes de Chicago y sus alrededores.
Fue idea del padre Donaldo Kenny, un sacerdote retirado de la diócesis de Joliet, quien falleció hace dos años.
Ahora Sor Margarita y las hermanas de su congregación continúan su labor. Ella dice que necesitan unos $2,000 dólares al mes para seguir al servicio de sus comunidades.
A parte de abastecer su clínica, esperan que las donaciones que reciban aquí les ayuden a reparar una guardería afectada por el terremoto y a instalar un sistema de agua potable.
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