CHICAGO - Iñaki Bascarán, el hombre de Lakeview encontrado en el río Chicago una semana después de salir de un bar de River North el otoño pasado, murió ahogado, según dictaminó la Oficina del Médico Forense del condado Cook.
Pero los investigadores no pudieron determinar si su muerte fue un accidente. La forma de la muerte fue catalogada como “indeterminada” por la oficina el 22 de enero.
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Bascarán, de 23 años, desapareció el fin de semana de Halloween después de salir de Celeste, un bar en la cuadra 100 de West Hubbard Street. Bascarán le había dicho a su compañero de cuarto por FaceTime que se dirigía a casa, pero nunca llegó, según su familia.
Cientos de voluntarios lo buscaron durante días. Se llevó a cabo una vigilia con velas afuera de su apartamento de Lakeview. Una semana después, el cuerpo de Bascarán fue encontrado en el río cerca de la cuadra 1000 de South Wells Street.
“Amamos tremendamente a nuestro hijo”, dijo su padre, José Bascarán, en un comunicado el jueves. “Lo digo en tiempo presente porque seguimos amando activamente a Iñaki a pesar de que se haya ido”, agregó.
Bascarán comentó que la familia estaba agradecida por el cierre, a pesar de que los resultados de la autopsia no pudieron concluir la forma de la muerte. Están “tratando de encontrar la paz enfocándose en mantener viva su memoria”, indicó su padre.
La familia de Bascarán, que tiene raíces en España y México, está trabajando para crear un programa de becas en memoria de Iñaki para que los estudiantes estudien en el extranjero.
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“A Iñaki le encantaba estudiar en el extranjero en Viena, explorar diferentes culturas alrededor del mundo y conectarse con personas donde quiera que fuera”, comentó su padre. “El espíritu aventurero de mi hijo vivirá para ayudar a otros a tener estas experiencias que cambian la vida que tanto apreciaba”, añadió.
Su familia agradeció a todos los que ayudaron a buscar a Bascarán.
“No hay palabras para expresar lo que ha significado para nosotros la gran cantidad de amor y apoyo durante un momento tan oscuro, y ese amor y apoyo continuarán ayudando a otros en este programa de becas”, expresó el padre.
Dijo que espera que la “energía exuberante” de su hijo viva y le recuerde a la gente que “permanezca unida cuando vaya a lugares”.
“Esto podría haberle pasado a cualquiera”, señaló Bascarán. “Iñaki querría que su historia se quedara en el corazón de la gente y les ayudara a evitar tragedias irreversibles. Por favor, cuídense unos a otros en su memoria”.
