Un ciudadano mexicano que era buscado por asesinato fue deportado el jueves a México y entregado a personal de la Procuraduría General de la República para que enfrente cargos criminales.
La expulsión fue realizada por personal del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), y de Ejecución y Deportación (ERO) con sede en Chicago.
Carlos Cortez Hernández, alias Jesús Agatón Martínez, de 34 años, tenía una ficha roja de la Interpol y era buscado tras la expedición en 2013 de una orden de detención penal emitida por el estado de Veracruz, en el este de México, debido a un asesinato con agravantes.
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Según la orden de aprehensión, el 8 de mayo de 2006, en el municipio de Juchique de Ferrer en el Estado de Veracruz, Cortez Hernández habría matado a tiros a Ventura Ferral Contreras.
La orden alega que el asesinato fue premeditado, y que Cortez Hernández disparó y mató a su víctima para vengar la muerte de su padre. Después, Cortez Hernández escapó a Estados Unidos para evadir a la justicia mexicana.
Las autoridades mexicanas recibieron información de que Cortez Hernández podría estar viviendo en el área de Chicago, por lo que agentes de Estados Unidos lo localizaron y arrestaron el 28 de enero en su residencia en McHenry, Illinois.
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El 9 de marzo, un juez de inmigración ordenó que Cortez Hernández debía ser deportado de Estados Unidos. Permaneció en custodia del ICE hasta el 21 de mayo.
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"Los fugitivos internacionales que piensan que pueden evadir la justicia huyendo a Estados Unidos debe tomar nota: no encontrarán refugio aquí", afirmó Ricardo Wong, director de la oficina del ERO en Chicago.
Desde octubre de 2009, ERO ha deportado a más de 900 fugitivos extranjeros que eran buscados en sus países de origen por delitos graves, como secuestro, violación y asesinato.
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