CHICAGO- El viudo de Marlén Ochoa y padre del fallecido Yovanny Jadiel López exigió justicia y catalogó como injusto los resultados de una investigación estatal que exoneró de negligencia al hospital que atendió el caso de su bebé.
“No es justo que el estado de Illinois y el hospital quieran aprovecharse de uno por ser latino y abusar de nuestra confianza, la verdad es muy doloroso, el perder a a una familia, a su esposa y a su hijo”, dijo durante una rueda de prensa Yovanni López, padre del bebé de Marlén Ochoa.
Una pesquisa no encontró que el hospital Advocate Christ en Oak Lawn cometiera irregularidades o negligencia el manejo del caso del bebé Yovanny, quien llevaba internado desde el 23 de abril después de que fue cortado del vientre de su madre, Marlén Ochoa.
"Es una basura, lo tiro porque es un pedazo de nada, eso es lo que pienso del reporte y el director de este departamento debe renunciar y debe de haber una nueva investigación", dijo un efusivo Frank Ávila, abogado de la familia.
El bebé falleció el viernes 14 de junio a causa de un grave daño cerebral y el sábado la oficina del médico forense del condado de Cook catalogó su muerte como un homicidio.
El Chicago Sun Times, reportó que el pasado 12 de junio en un correo electrónico envíado al presidente del hospital Christ, el Departamento de Salud Pública de Illinois (IDPH) dijo que tras indagar las alegaciones y denuncias presentadas, “el hospital cumplió con los requisitos estipulados bajo las condiciones del Medicare y se seguirá considerando que siguen en cumplimiento".
"Nosotros estamos pidiendo al director del Departamento de Salud Pública de Illinois, al gobernador de Illinois que abran esta investigación, que haya justicia para Yovanny, para Marlén. Estamos ya cansados, que los latinos y afroamericanos que no tengamos la ley para protegernos, Tiene que haber justicia para esta familia”, dijo Julie Contreras.
Información adicional sobre la investigación no fue difundida por el Departamento de Salud Pública de Illinois, amparandose bajo la Ley HIPAA.
En parte de la pesquisa el hospital Advocate Christ emitió la siguiente declaración:
"Nuestros corazones y oraciones continúan estando con la familia Ochoa-López, cuyo valor y gracia han atraído la admiración de toda nuestra organización. Agradecemos al Departamento de Salud Pública de Illinois por su exhaustiva revisión y a CMS por su evaluación, que demostró que la atención médica proporcionada y las medidas tomadas por nuestro personal fueron apropiadas.
"Sin embargo, estamos comprometidos a aprender de la experiencia para mejorar los procesos. Además, nos gustaría expresar nuestro más profundo agradecimiento a nuestro equipo dedicado por su incansable compromiso de brindar una atención compasiva y de clase mundial".
El IDPH inició la investigación en mayo después de que Clarisa Figueroa, su hija Desirée y su compañero Piotr Bobak presuntamente mataron a Marlén y trataron de pasar al bebé como si fuera suyo.
Ese día, fiscales dijeron que Clarisa Figueroa, llamó al 911 y dijo que había dado a luz y que el bebé no respiraba, luego tanto ella como el bebé fueron trasladados a Advocate Christ Medical Center para recibir tratamiento, y en donde el personal del hospital dijo a las autoridades que su cuerpo no mostraba signos de haber dado a luz.
Cabe resaltar que el Departamento de Servicios para Niños y Familias no fue notificado sobre el recién nacido hasta el 9 de mayo, dijo en ese entonces el portavoz del DCFS, Jassen Strokosch.
El 20 de mayo, el alguacil del Condado Cook aseguró que su oficina no estaba a cargo de la investigación y que le habían pedido el Departamento de Servicios para Niños y Familia de Illinois, que revisaran los pasos que siguieron los encargados del hospital cuando llegó el bebé.
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