Cómo hacer una prueba de manejo

Comprar un auto, ya sea nuevo o usado, no sólo significa desembolsar una cantidad importante de dinero, sino también, una decisión que impactará tu vida diaria por algunos años. Uno de los recursos a tu alcance para hacer una elección sensata es el famoso “test-drive” o prueba de manejo, que ofrecen todas las concesionarias. Pero, ¿en realidad puedes conocer un auto con tan solo conducirlo unas cuantas cuadras? Según Tara Weingarten, editora del portal Vroomgirls.com, especializado en ayudar a mujeres a comprar autos, la respuesta es: no, no es suficiente. Sin embargo Weingarten recientemente se presentó en el programa de televisión “Today”, de la cadena hermana de Telemundo, NBC, y dio consejos prácticos para hacer de ese “test-drive”, una experiencia valiosa que en realidad le ayude a hacer la compra correcta. Primero que nada, la experta aconseja extender la prueba de manejo a un mínimo de 30 minutos, sin dejarse intimidar por el impaciente vendedor de autos. Además, recomienda conducir varios autos durante el mismo día para una comparación más efectiva. Habiendo tomado esas medidas, a continuación listamos algunas de las otras recomendaciones de Weingarten: Comodidad. Entra y sal del auto varias veces. Manipula el asiento, los espejos, los pedales, el volante. No te detengas en el puesto de conductor, asegúrate que la comodidad se extienda al sitio del copiloto y el de los pasajeros. Espacio de almacenamiento. Evalúa tus necesidades de espacio y sé realista. Para eso existe el test-drive. Considera todo lo que en algún momento dado necesitarás transportar, desde lo más obvio, como el porta-bebé, si eres madre de familia, hasta lo menos usual, como equipos deportivos o maletas. Toca todo. Oprime los botones, abre los compartimientos, baja y sube la ventana. Si no te gusta algo, ahora es el mejor momento de saberlo. Practica maniobras. Según Weingarten, esto puede asustar a tu vendedor durante la prueba de manejo, pero si lo haces cuidadosamente, en una calle poco transitada, te darás cuenta cómo responde el auto en reversa, si frena bien, si puedes hacer vueltas cerradas, etc. Maneja en autopista. Esto alerta de cómo responde el auto a velocidades altas. ¿Acelera fácilmente? ¿Hace mucho ruido? Prueba las luces. Enciende y apaga tanto las luces exteriores como las interiores. No sólo es importante que funcionen, sino también deben de ser prácticas de operar y por supuesto, de tu agrado.

Y tú, ¿tienes otros consejos para sacarle partido a un test-drive? ¡Escríbenos más abajo!

Contáctanos