En un adorable vídeo grabado por la Fundación de Vida Silvestre del Zoológico de Miami, Angélica, una mona capuchino, es castigada y retirada del área de juego. Y, claramente, está devastada.
Según explicaron oficiales de la fundación, Angélica, de dos años, es una mona capuchino, al igual que su amigo Toby, de casi cuatro. El par se encontraba jugando con un perrito Yorkie, cuando Toby haló una patita del can.
Los monos fueron regañados, y Angélica corrió para esconderse. Como resultado, ambos fueron castigados.
En el vídeo, se ve a Angélica inconsolable, mientras pone su cabeza sobre sus manitas.
Pero su amigo Toby le demostró su solidaridad. El monito puso su brazo sobre su amiga, y hasta le rascó la cabeza. Poco después, ambos fueron indultados.
