Ataque concidía con muerte de bin Laden

De acuerdo a varios medios de comunicación estadounidenses, el complot tenía previsto detonar un artefacto explosivo en un avión de pasajeros en el primer aniversario de la muerte de Osama bin Laden.

Un dispositivo explosivo no metálico, similar al utilizado en un fallido plan para derribar un avión con destino a Detroit en el 2009, se encuentra en poder de las autoridades estadounidenses, indicaron las autoridades.

El FBI informó que el dispositivo fue confiscado en el extranjero, y que está en curso un análisis técnico y forense.

El dispositivo es similar a otros utilizados previamente por Al-Qaeda en la Península Arábiga, grupo que es descrito por funcionarios occidentales como el ala afiliada de la red más peligrosa, informó el FBI.

Un funcionario yemení dijo a CNN que su gobierno fue informado de un posible ataque ligado al aniversario de la muerte de Bin Laden. El blanco aún no había sido elegido, dijo el funcionario, y la alerta fue enviada a Estados Unidos y a otros socios en la guerra contra el terrorismo.

La Casa Blanca por su parte informó que el presidente Barack Obama fue advertido sobre la trama en abril de este año, y que el intento de atentado “subraya la necesidad de mantener la vigilancia contra el terrorismo aquí y en el extranjero”.

Es claro, destacaron las autoridades que el grupo extremista Al-Qaeda en la Península Arábiga está reestructurando sus técnicas para fabricar bombas en un intento por evitar las causas de la falla en el dispositivo del 2009”, dijo el funcionario estadounidense, en referencia al incidente de Detroit.

Funcionarios estadounidenses creen que Al-Qaeda en la Península Arábiga tiene más de 1,000 miembros en Yemen, y conexiones con el liderazgo de Al-Qaeda en Pakistán.

De acuerdo a versiones publicadas en distintos medios, el ala yemení ha estado detrás de dos de los más audaces intentos para atentar en Estados Unidos en años recientes: el intento de atentado en el 2009 en Detroit, y el intento de derribó de aviones de carga con bombas instaladas en el 2010 dentro de cartuchos de impresión, cuyo destino era Chicago.

El gobierno de Yemen ha combatido al grupo por años, con resultados mixtos.

En tanto, un vocero del Departamento de Seguridad Interna dijo públicamente que las autoridades no tienen “información específica o creíble sobre un posible plan terrorista contra Estados Unidos en estos momentos”, aunque continúan monitoreando los esfuerzos terroristas por realizar dicho tipo de ataques.

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