Un millón para familia de activista

May Molina, de 55 años, fue arrestada en su casa en 2004 por cargos de narcotráfico.

Después de pasar 30 horas en la cárcel, Molina, diabética asmática que usaba silla de ruedas, fue encontrada muerta en su celda.

"Estamos alegando que ignoraron las llamadas de otros prisioneros, de sus abogados, y un jurado encontró a siete funcionarios responsables. Actuaron irracionalmente y son responsables de la muerte de la señorita Molina”, dijo Jon Loevy, abogado de la familia.

Loevy indicó que incluso de otros reclusos pidieron que llamar a los médicos, pero se ignoraron sus súplicas.

“Todas sus súplicas cayeron en oídos sordos", dijo Salvador Ortiz, hijo de Molina. "Treinta horas es demasiado tiempo".

La municipalidad argumentó en el juicio civil que Molina había tragado paquetes de heroína, y que más de 80 paquetes fueron encontrados en su casa, lo que sugiere las drogas fueron un factor en su muerte.

Pero el abogado de Molina afirmó que aún se le debió haber prestado atención médica.

Los funcionarios municipales señalaron que planean apelar la decisión.

Contáctanos