Son 13 los muertos en Colombia

BOGOTÁ - Las autoridades colombianas descartaron este sábado que haya más víctimas mortales por el estallido de un poliducto en el centro oeste del país, tras el levantamiento legal de 13 cadáveres.

Un total de 13 personas murieron por la explosión registrada el viernes y 99 más resultaron heridas, según señaló el sábado a Efe una fuente de la Dirección de Gestión del Riesgo (DGR).

La portavoz de la DGR, Sandra Calvo Pinzón, indicó a Efe que ése es el balance consolidado de la tragedia que afectó al municipio de Dosquebradas, en el departamento de Risaralda, a unos 280 kilómetros al oeste de Bogotá.

El mismo viernes se confirmó que la explosión se produjo por el derrame de gasolina y acumulación de gases sobre el lecho de la quebrada Agua Azul tras la fractura del tubo, debido a la saturación de agua en la región por la temporada de lluvias que afecta al país desde comienzos de septiembre pasado.

"Movimientos del terreno debido a la acumulación de agua por la ola invernal rompieron la tubería", explicó a los periodistas el viernes el vicepresidente interino de la Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol), Pedro Rosales.

La mayoría de las víctimas falleció en el lugar de la tragedia cuando los habitantes de la zona afectada, unos 400, dormían en el momento de la explosión.

Las llamas recorrieron unos 1,500 metros de la quebrada Agua Azul y sus orillas y la explosión alcanzó a los barrios aledaños.

El estallido se registró hacia las 04.30 hora local (09.30 GMT) en el sector de Villa Carola, el barrio más afectado.

El director de Socorro Nacional de la Cruz Roja Colombiana, César Urueña, descartó a periodistas que haya mas víctimas mortales en el lugar y anunció que terminó la búsqueda, en la que participaron perros amaestrados, y anunció que ahora viene la tarea de remover los escombros.

Urueña dijo también que los sobrevivientes y los heridos, como lo anunció el viernes la alcaldesa de Dosquebradas, Luz Ensueño Betancourt, reciben atención sicológica.

La portavoz de la DGR señaló también a Efe que unas 85 casas fueron destruidas y averiadas.

Entre el casi centenar de heridos figuran 23 niños, algunos en las áreas de cuidados intensivos de los hospitales de la localidad afectada y de Pereira, capital de Risaralda.

Algunos de estos menores, incluida una bebé de cuatro meses, se encuentran en estado "muy grave" y tienen que permanecer "con respiración asistida", según señalaron este sábado fuentes médicas del hospital San Jorge de Pereira.

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