Sospechoso imaginó matar a carceleros

CENTRO DE REDACCIÓN - El ex-convicto y sospechoso en el asesinato del jefe de la cárcel de Colorado, Tom Clements se quitó su brazalete de monitoreo electrónico antes de que nadie se percatara. Todo ocurrió después de que fue liberado de la cárcel, por error, cuatro años de lo previsto. Un sistema informático que registraba los movimientos de Ebel Evan Spencer dejó de funcionar el 14 de marzo, según documentos divulgados este martes. Los oficiales se enteraron de que había huido el 19 de marzo, el día en que Tom Clements, el Jefe de Prisiones fue baleado fatalmente al abrir la puerta de su casa.

Este lunes, funcionarios de la corte reconocieron que un error administrativo y procesal permitió que Ebel saliera de la prisión cuatro años de lo que su condena exigía. Una carta del 2006 obtenida por The Associated Press este martes, revela que Ebel, escribió fantaseando en cómo matar a los funcionarios de la prisión. "Tenemos que hacerlo mejor en el futuro", dijo Tim Hand, director del Departamento de Corrección de la División de Libertad Condicional. Ebel, que murió después del 21 de marzo en un tiroteo en Texas, había sido un preso en libertad condicional modelo hasta que su brazalete de monitoreo electrónico dejó de funcionar. Antes de eso, llamaba todos los días, aunque sea una vez. Su padre le proporcionó vivienda y un trabajo en su bufete de abogados, pero en la tarde del 14 de marzo, una "alerta de manipulación" quedó registrado en el sistema informático que mostraba a la prisión que la pulsera había dejado de funcionar, según consta en los documentos. Dos días más tarde, los funcionarios de prisiones llamaron a Ebel a reparar el brazalete, pero él, nunca más se presentó. El 17 de marzo, Nathan León, padre de tres hijos y repartidor de pizzas , fue asesinado a balazos después de responder a un pedido de pizza en Denver. Ebel es sospechoso en el asesinato. No fue hasta el 18 de marzo que los oficiales de libertad condicional hablaron con el padre de Ebel, quien les dijo que temía que su hijo había huido y les dio permiso para registrar su apartamento. Al día siguiente, dos oficiales de libertad condicional vieron que Ebel había tomado una gran cantidad de ropa y huyó. Esa noche, Clements fue baleado. Una orden de arresto contra las violaciónes de libertad condicional contra Ebel se publicó el pasado 20 de marzo. Al día siguiente se convirtió en un sospechoso en ambos asesinatos después de morir en un tiroteo con las autoridades de Texas. La pistola que Ebel había utilizado fue la misma que se utilizó para disparar y matar a Clements. Los funcionarios judiciales reconocieron este lunes que Ebel no debería haber sido puesto en libertad, en enero.

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