Hijos de un trabajador de la empacadora de carnes Ruprecht llegaron hasta un centro de detención de ICE para despedirse de su padre e intentar detener su deportación.
Juan Antonio López Ramírez padre de 4 niños ciudadanos americanos llevaba trabajando en la empresa ubicada en Mudelein, Illinois hacía nueve meses cuando fue detenido por ICE luego de una auditoría de revisión de documentos a sus empleados.
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En base a la revisión de la documentación, la agencia emitió una orden exigiéndole a Ruprecht suspender a todos los empleados que habían presentado documentación fraudulenta, según parámetros del Departamento de Seguridad Nacional, Inmigración y Control de Aduanas.
Ruprecht en ese momento dijo que el ICE detuvo a varios empleados por supuestamente tener antecedentes penales.
La madre del trabajador dijo a Telemundo Chicago, que su hijo fue detenido por no tener una identificación válida para trabajar en los Estados Unidos.
Telemundo Chicago se comunicó con Departamento de Inmigración para obtener los cargos oficiales por los que están deportando a Juan Antonio, pero estos no comparten esta información hasta que el caso concluya o la persona haya sido removida del país.
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“Mi hijo no es un criminal…. no mató, no violó, no robó y aún así me lo están deportando” dijo entre lágrimas y lamentos doña Leonor Ramirez madre de Juan Antonio.
Mientras tanto la familia con el respaldo de la organización LULAC, llegaron hasta los portones del centro de detención no solo para llorar por la partida del padre si no también para hacer escuchar su voz en reclamo de una reforma migratoria justa y evitar la separación de familias.
