Una madre y su hijo que no se habían visto en más de 30 años por fin tuvieron la oportunidad de reunirse en San Diego este sábado.
David Amaya, de 37 años de edad, fue secuestrado por su padre cuando era niño para llevárselo a México.
Todos estos años, David no tenía idea que su madre, Kathy Amaya, residente de Wisconsin, lo había estado buscando.
El pasado 30 de octubre, agentes de la Patrulla Fronteriza detuvieron a David tratando de ingresar ilegalmente a Estados Unidos. Pasó dos días con un grupo de indocumentados.
David insistió en que era ciudadano estadounidense. Los oficiales entonces localizaron una copia de su acta de nacimiento demostrando que nació en Chicago en 1976.
Lod agentes entonces localizaron la madre de David.
La reunión del sábado en el aeropuerto internacional de San Diego fue emotiva.
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El vuelo de Kathy proveniente de Wisconsin arribó a las 11:20 a.m., y se encontró con una gran cantidad de medios de comunicación.
Antes de ver a su madre, David desayunó y dijo una oración. Relató que casi no durmió la noche anterior preparándose para el momento.
Acompañado por un traductor, David dijo en español que estaba ansioso.
Los dos hablan diferentes idiomas, pero cuando llegó el momento de encontrarse, se entendieron perfectamente.
"Te quiero, mami", le dijo a su madre.
"Yo también te amo", dijo Kathy.
Desde su ingreso a Estados Unidos, David se ha alojado en una iglesia en San Diego.
Kathy dijo que estaba feliz de ver a su hijo, pero admitió que algunas de las emociones son agridulces, sobre todo cuando piensa en todos los momentos importantes de la vida de su hijo que se ha perdido.
"Ha crecido y no asistí a su graduación ni a su primer día de escuela", se lamentó.
En español, David dijo que lo único que quería hacer era abrazar a su madre.
Kathy tiene previsto regresar a Wisconsin con David para que conozca a sus familiares.
"Tiene abuela, tíos y un montón de primos, dijo.
