El hallazgo del diario de una brillante adolescente que murió a los 17 años víctima de la anorexia ha conmocionado a los medios británicos y ha trascendido las fronteras de este país. El documento escrito por Charlotte Seddon y dado a conocer recientemente, cuenta de su enfermedad mental y describe su obsesión por perder peso, ejercitarse y “purgarse”. La joven murió repentinamente tras haber sido dada de alta de una clínica en Cheshire, Inglaterra, donde recibía tratamiento para su enfermedad y en donde su naturaleza de líder la llevó a ser mentora de otras chicas con sus mismos problemas, diciéndoles que debían de comer y tomar sus medicamentos. Pero su intención de alentar a otros escondía lo grave de su propia condición. Cuando Charlotte colapsó y murió en noviembre del año pasado en su hogar de Burnley pesaba 38 kilos y su corazón pesaba sólo 190 gramos, cuando uno normal pesa 320, publicó el diario Huffington Post en su versión británica. “Son muy buenos escondiéndolo”, dijo la madre de Charlotte al diario. “Yo le pediría a la gente que se sienten a la mesa y coman juntos. Al principio lo dejas pasar porque no los quieres molestar”.
