Un joven de 14 años de edad, recibió un disparo por la espalda afuera de Sarah E. STEM Goode Academy, en el barrio de Ashburn, ubicado en el suroeste de Chicago. De acuerdo a las declaraciónes de su madre todo se debió a una conversación sobre afiliación a pandillas.
Carmelita Rice dijo que su hijo, Javier Cameron, es un estudiante ejemplar en la CICS Ralph Ellison, una escuela cercana. Él había estado en la zona y la conocía, ya que acababa de graduarse de la escuela primaria de Lionel Hampton, que está justo enfrente de la academia, en la cuadra 7700 de South Homan Avenue.
Rice señaló que la zona, por lo general, es segura, un lugar donde los niños de todas las edades se reúnen con frecuencia. A eso de 7:45 horas del jueves, Cameron iba a acompañar a dos chicas a su casa cuando fue abordado por dos jóvenes que le preguntaron si formaba parte de una pandilla específica, recordó Rice.
Cuando Cameron negó cualquier afiliación con alguna pandilla, ellos insistiron en el tema, dijo Rice.
Entonces uno de los chicos sacó una pistola y disparó, pero el arma se quedó atrancada. Pensando que la pistola era de juguete, contó Rice, su hijo se echó a correr. Fue entonces cuando recibió el disparo por la espalda. La bala impactó el hígado, el páncreas y el intestino delgado, y se alojó del lado izquierdo cerca de sus costillas.
"Tiene mucho dolor”, comentó la madre afuera del Advocate Christ Medical Center en Oak Lawn, donde su hijo fue sometido a una cirugía. "Este disparo es una locura. No acostumbraba dejarlo salir solo. Ahora que se lo permito, justo le disparan y en la calle que todo el mundo juega."
La policía informó que los chicos que dispararon a Cameron huyeron después del incidente y aún no habían sido capturados la mañana del viernes.
Finalmente, Rice indicó que Cameron es el más joven de sus tres hijos y que ignoraba quién le había disparado.
