La policía de Chicago informó que detuvo y acusó a un hombre en relación a una balacera que dejó a una madre de tres muerta y a su hija de 14 años herida en el estacionamiento de un centro comercial en el suburbio de North Riverside.
El martes, Honorio Perez, de la cuadra 2500 Trumbull en Chicago, fue formalmente acusado por la policía de asesinato en primer grado y asalto agravado con un arma de fuego.
Información adicional aún no ha sido divulgada por la policía de North Riverside.
Perez, había comprado un boleto de autobús para partir de Chicago a Guadalajara, pero un empleado en la terminal reconoció su foto difundida en un volante y alertó a las autoridades.
Perez, fue bajado del autobús por los oficiales para ser interrogado. La policía dijo que esperan presentarle cargos formales el martes.
María Ruiz de 42 años y madre de tres menores, fue asesinada a tiros en lo que la policía cree fue incidente de carácter doméstico en el estacionamiento de una tienda JCPenney en North Riverside Park Mall.
Su hija de 14 años pudo sobrevivir y de acuerdo a la policía se encuentra en condición estable.
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Después del tiroteo, José Ruiz su hijo mayor de 19 años creó una cuenta de GoFundMe pidiendo ayuda para poder pagar el funeral de su madre y en tan solo horas lograron recaudar más de $14,000.
De acuerdo con la policía de North Riverside, el sábado alrededor de las 5:46 p.m. agentes llegaron a la escena de una balacera reportada en el estacionamiento del North Riverside Park Mall, ubicado en el 7501 W. Cermak Rd.
Ruiz, quien residía en la cuadra 2200 de South Sawyer en el vecindario de La Villita, fue declarada muerta en la escena las 6:14 p.m. por forenses del condado de Cook.
Fuentes cercanas a la investigación indicaron que la persona que se cree jaló el gatillo es un hombre que al parecer podría haber mantenido una relación con la víctima, pero tras el incidente este huyó del lugar antes de que los agentes llegaran.
Los oficiales determinaron que el incidente fue "aislado y de naturaleza doméstica", dijo el jefe adjunto de policía de North Riverside, Christian Ehrenberg, en un comunicado.
Esa noche los impactos de bala se podían ver en la ventana de su vehículo, mientras que la policía acordonó el estacionamiento en donde otros clientes no salían del asombro por lo ocurrido.
"Estoy muy sorprendida, ya sabes, North Riverside Park es un centro comercial familiar, mucha gente trae a sus hijos aquí, así que definitivamente estoy conmocionada", dijo Mia Williams una empleada del mall.
