Luego de dos fines de semana de violencia en Chicago, alrededor de unos 200 oficiales de la policía podrían ser destinados a proporcionar seguridad para una boda este sábado.
Con otro fin de semana en el que se pronostican altas temperaturas, los funcionarios recibieron la orden de asegurar los alrededores del lugar donde se llevará a cabo la boda de la hija de la asesora principal de la Casa Blanca, Valerie Jarrett, de acuerdo el columnista Michael Sneed del diario “Chicago Sun-Times”.
El presidente Barack Obama y la primera dama Michelle Obama están en la lista de invitados a la boda. La primera familia llega a Chicago el viernes por la noche.
Sneed informa que policías de todos los distritos de la ciudad serán enviados a trabajar en la boda en Kenwood y una sección del vecindario será rodeada.
No se autorizarán horas extras para los policías, informó Sneed.
El fin de semana pasado, ocho personas murieron y 46 resultaron heridas de bala, en diferentes incidentes de violencia y crimen, alrededor de la ciudad.