Padre de sospechoso de tiroteo mortal pide disculpas

Dijo que su hijo "recibió lo que se merecía".

CALIFORNIA - El padre del sospechoso involucrado en el tiroteo donde murió un agente de la Policía de Caminos de California (CHP) comentó que su hijo estaba pasando por muy malos momentos.

El martes por la tarde aún no se daba a conocer que tipo de infracción cometió el sospechoso cuando lo pararon, ni por que se encontraba armado.

Gabriela Mendoza, una testigo que grabó las imágenes impactantes del tiroteo creyó que el hombre, vestido de negro con un arma, era un agente de la ley. Fue cuando escuchó los disparos que se dio cuenta que estaba frente a una sangrienta balacera.

“Yo pensaba que era un policía porque estaba vestido de negro y con el arma bien grande, así que pensé que era oficial”, dijo Mendoza, que también vio cuando le estaba disparando a los oficiales.

Mendoza se dirigía a la escuela cuando quedó a unos pies de distancia de la balacera.

Este incidente le cobró la vida a un agente de la Policía de Caminos de California, Andre Moye, de 33 años. Otros dos oficiales resultaron heridos y el pistolero murió.

“Nomás estaba tirando, sino era la policía, nomás estaba tirando”, dijo Mendoza.

El sospechoso fue identificado como Aaron Luther de 49 años. No se ha revelado el tipo de rifle que uso el lunes, después de las 6 p.m., tras ser detenido por una infracción de tráfico.

“El sospechoso tiene un récord criminal y fue arrestado hace varios años”, dijo Esteban Carapia, portavoz de CHP.

Dennis Luther, el padre del sospechoso, ofreció sus condolencias y disculpas a los familiares del agente muerto y de los heridos. Comentó que su hijo pasaba por problemas maritales y de desempleo.

“Yo estoy orando por los oficiales, antes que orar por mi hijo, dijo Luther.

Luther agregó que su hijo fue y cometió la balacera. Que recibió lo que se merecía, y que nadie que comete ese tipo de crímenes debe esperar regresar a su casa como si nada hubiese pasado.

El portavoz del CHP informó que de los dos oficiales heridos, uno ya fue dado de alta y el segundo permanece hospitalizado en condición delicada pero estable.

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