NUEVA ZELANDA – Es más que seguro que levantará miles de suspiros y que incluso romperá varios corazones, pero nunca nos imaginamos que el príncipe George haría llorar a una mujer a tan temprana edad.
Durante su visita a Nueva Zelanda, el pequeño galán logró conmover a lágrimas a una bebé tras tomarla del brazo mientras que Kate platicaba con la madre de la pequeña. ¿El motivo? Su muñeca de madera que pareció interesarle más que las pláticas, las miradas e incluso los flashes de los periodistas que lo rodeaban.
Todo ocurrió durante un evento llevado a cabo en la casa de gobierno como parte de su gira por Australia y Nueva Zelanda. Seis niñas y cuatro niños, todos cerca de la misma edad de George, tuvieron la oportunidad de jugar e interactuar con el pequeño príncipe y sus famosos padres, Kate y William.
La reunión fue auspiciada por una organización que se dedica a brindar apoyo gratis a padres por primera vez y la idea detrás del evento fue introducir al pequeño George ante el mundo de una manera menos formal para marcar su primer compromiso oficial.
Los asistentes comentaron que el pequeño George jugó e hizo rabietas como cualquier otro bebé de su edad mientras que muchos quedaron asombrados por su nivel de inteligencia asegurando que caminará pronto.
