La fuerte presión mediática por lucir un cuerpo diez y una cara sin arrugas nunca ha asustado a María celeste Arrarás, según recoge la revista People en Español.
La presentadora reconoce que sí existe presión por mantenerse perfecta ante las cámaras, pero ella no se guía por esos patrones, sino por lo que quiere de ella el público que la sigue.
“Yo creo que la gente ve en mí y espera de mí más que ser una eterna talla 2 o 4, y tener una cara a prueba de arrugas”, dice Arrarás. “Creo que el público me quiere por mi dedicación, porque tengo una cabeza pensante y por mi calidad humana”.
A pesar de ser una mujer fuerte y segura de sí misma, también aclara que tiene sus propios truquitos de belleza que la ayudan a mantenerse. Lo más importante para ella es desmaquillarse e hidratar el cutis cuando no está trabajando.
Por otro lado, con la edad, la experiencia y la sabiduría, la presentadora ha aprendido a disfrutar más de la vida, lo que la rodea y a relajarse.
“Siempre he tenido una autoestima saludable porque nunca he basado mi percepción de mí misma en lo físico. Navego en la dimensión de los pensamientos, no de los espejos, y eso me da seguridad”.
La periodista asegura que al verse en el espejo se ve feliz y que “veo a la misma María Celeste de cuando era niña, siempre curiosa y apasionada de la vida. Así espero verme hasta el último de mis días”.
