Los manifestantes desafiaron la lluvia y el frío para exigir que restaurantes de comida rápida como Wendy’s y McDonald’s paguen un salario mínimo de $15 la hora.
La protesta se llevó a cabo este jueves afuera del restaurante McDonald’s en el 600 N. Clark St.
Manifestantes expresaron que no sólo se trata del salario mínimo, sino que también se les debe tratar con respeto.
"Esperamos que McDonald’s se dé cuenta de que no somos reemplazables", dijo Adriana Álvarez, una madre soltera de 22 años, de Cícero, quien señaló al diario Chicago Sun-Times que trabajó durante dos años sin un aumento para esa cadena de restaurantes.
Y añadió: "Siempre nos dicen 'Usted es reemplazable; podría contratar a alguien más'".
El salario mínimo federal de $7.25 fue elevado por última vez en 2009. Dicha cifra equivale a unos $15,000 anuales, si se asume que el empleado trabaja 40 horas semanales.
La manifestación en Chicago formó parte de una protesta a nivel mundial contra restaurantes de comida rápida.
